Los implicados en incidente fueron trasladados a la cárcel tras la audiencia de flagrancia. Foto: EL COMERCIO
Cinco ciudadanos son investigados por el delito de ataque y resistencia, tras un incidente que ocurrió el 17 de febrero del 2019 en el hospital San Vicente de Paúl, de la capital de Imbabura, ubicado en el norte de Ecuador.
La tarde de este 18 de febrero del 2019 se realizó la audiencia de flagrancia en un Juzgado de Garantías Penales de esa provincia. Ahí el juez dictó prisión preventiva para las cinco personas acusadas de destruir un cristal de la puerta principal de la sala de emergencia y presuntamente agredir física y verbalmente a médicos, enfermeras y luego a agentes de Policía, que se encontraban en el lugar.
Según el parte policial, la tarde de 17 de febrero de 2019, dos mujeres y tres hombres, llegaron a la casa de salud, la principal de Imbabura, solicitando atención para uno de ellos. Al no recibir el servicio inmediato habrían insultado a funcionarios de salud. Luego destruyeron el vidrio.
Una llamada telefónica al ECU 911, Ibarra, alertó a la Policía. En ese lugar se encontraban varios gendarmes atendiendo otro caso. Pero, ante el incidente intervinieron, hasta que llegaron refuerzos.
Mientras los agentes detenían a uno de los agresores, sus acompañantes forcejeaban obstaculizando la labor policial. La escena, que se desarrolló a las afueras de la sala de emergencia, quedó grabada en videos que luego circularon en las redes sociales.
Según Lyther Reyes, gerente del hospital, la atención en el área de emergencia se realiza de acuerdo a prioridades, dependiendo de la dolencia. En el caso del ciudadano que llegó solicitando ayuda, junto a los cuatro acompañantes, no presentaba un cuadro que ponga en riesgo su vida. Sin embargo, el grupo exigía atención rápida.
El abogado de los implicados solicitó medidas sustitutivas a la prisión preventiva. Pero, el juez consideró que y el domicilio de los tres detenidos en (un hostal) no eran garantías de arraigo.
Mientras tanto, otro ciudadano, cercano a los detenidos, fue privado de la libertad en la madrugada de este 18 de febrero en las inmediaciones del Comando de Policía de Imbabura por escándalo público y amenazas a los agentes. El fue sancionando con tres días de prisión.
La Fiscalía tiene un plazo de 30 días para investigar este caso y determinar la responsabilidad de cada uno de los detenidos.