Londres, Ansa
El príncipe Harry de Inglaterra, tercero en la línea de sucesión a la Corona británica, quiere volver a combatir en Afganistán como piloto de helicópteros de ataque Lynx.
Harry, de 25 años y que lleva a cabo entrenamientos con el Cuerpo de la Armada Aérea, se enlistó para pilotear los helicópteros de guerra, valuados en 45 millones de dólares.
Según fuentes militares citadas por el tabloide inglés The Sun, las posibilidades de que el nieto de Isabel II sea enviado a Afganistán a combatir “son elevadas” , a pesar de los peligros de ser atacado por los talibanes.
Uno de los voceros militares afirmó al periódico que Harry “se está convirtiendo en un increíble piloto de helicópteros”.
A pesar de haber desaprobado un examen de matemáticas durante los entrenamientos con la Royal Air Force (RAF), el hijo menor del príncipe Carlos y la fallecida Lady Di es considerado uno de los mejores estudiantes de su clase, principalmente por su rendimiento en las clases prácticas como piloto.
“Volar el nuevo (helicóptero) 9A es su deseo y si es aprobado la única tarea que podrá hacer es pilotear ese aparato aéreo para combates en Afganistán”, agregó la fuente.
El príncipe ya había pasado diez semanas en Afganistán, donde se desempeñó como controlador aéreo para su regimiento de los Blues & Royals, y a pesar de los temores por su seguridad, dejó en claro que desea regresar a combatir a ese país asiático.
De acuerdo al Sun, la semana próxima las autoridades militares harán un anuncio oficial sobre el futuro de Harry. En caso de ser enviado a Afganistán, Harry deberá someterse a un intenso período de entrenamiento.