Varias corresponsalías
Guillermo Delgado se levantó ayer temprano. El reo del Centro de Rehabilitación Social de Esmeraldas quería cumplir bien su función como secretario de la única junta receptora del voto (JRV) que se instaló en la cárcel.
A las 09:00 se inició el proceso electoral, frente a autoridades del Consejo Nacional Electoral (CNE). 2 743 presos sin sentencia fueron empadronados por primera vez en el país para participar como electores este 2009.
Delgado fue uno de los primeros en sufragar por cinco parlamentarios andinos. Esa fue la única dignidad que escogieron ayer los presos de las cárceles, donde los comicios se adelantaron dos días, tal como ocurrió el pasado abril, cuando se eligieron Presidente de la República, asambleístas, prefectos, alcaldes y concejales.
Las elecciones generales de parlamentarios andinos están previstas para mañana en las JRV instaladas en centros educativos a escala nacional. Allí se escogerán, además, los 280 miembros de 56 juntas parroquiales del país.
En menos de dos horas, los 56 presos sin sentencia ejecutoriada del Centro de Rehabilitación de Esmeraldas cumplieron su derecho al sufragio.
En el Centro de Rehabilitación Social de Santo Domingo el proceso, que incluyó a 29 votantes, terminó antes del mediodía. El primero en sufragar fue Frans Coronado, quien presidió la JRV. En cambio, en la Penitenciaría del Litoral, donde había 1 070 presos empadronados, los comicios se efectuaron ayer con retrasos.
En Quito, a su vez, 531 prisioneros fueron registrados para votar; 393 de ellos, en el penal García Moreno; así como 74, en el Centro de Rehabilitación Social de Mujeres de El Inca.
Al final, las urnas fueron custodiadas por las FF.AA. Mañana, cuando concluya el sufragio, se hará el escrutinio de votos.
Para Delgado fue importante votar, porque sintió que la sociedad ahora los toma en cuenta.