Unidad nacional, lucha contra la corrupción y homenajes a los fallecidos por covid-19 marcaron la ceremonia en el Templo de la Patria

El vicepresidente Otto Sonnenholzner llegó al Templo de la Patria este domingo 24 de mayo del 2020. Foto: Diego Pallero / EL COMERCIO

La ceremonia militar por los 198 años de la Batalla de Pichincha fue inédita. Los asistentes concurrieron con mascarilla y guardaron medidas de bioseguridad para evitar contagiarse con el covid-19. El vicepresidente Otto Sonnenholzner pronunció un discurso en el que pidió unidad nacional.
“Este acto nos recuerda la capacidad de nuestro país de ganar batallas, juntos, como nación. Hoy las batallas son varias: la lucha contra el coronavirus, la corrupción, las noticias falsas, hambre, inequidad y contra los intereses mezquinos de unos pocos que no quieren que Ecuador abra los ojos”.
La alocución del Segundo Mandatario fue precedida por un minuto de silencio en homenaje a las víctimas del covid-19 en el país. Sonnenholzner recordó que hay soldados que murieron en el cumplimiento de las tareas para evitar la propagación del virus.
Este 24 de mayo del 2020 se conmemora otro aniversario de la batalla que selló la independencia de los territorios que más tarde se conocerían como Ecuador. Además, es el día principal de las Fuerzas Armadas.
En la ceremonia, el Vicepresidente y el ministro de Defensa, Oswaldo Jarrín, entregaron una ofrenda floral en honor a los soldados caídos en la gesta independentista del 24 de Mayo de 1822.
Sonnenholzner, también se refirió a los escándalos de corrupción que se generaron durante esta emergencia sanitaria. En al menos 14 hospitales se abrieron investigaciones por la compra de insumos con sobreprecios. Además, está procesada la exsecretaria de Gestión de Riesgos, Alexandra Ocles, por la compra de kits alimenticios que estarían por sobre el costo del valor comercial.
“Es penoso, realmente doloroso, el mal de la corrupción nos ha perseguido por varios años. En mis recorridos he visto a centenas de médicos en los hospitales y duele mucho que en el mismo edificio, en el mismo hospital, existan tres o cuatro pillos, que se enriquecían. Enriquecerse a costa del dolor ajeno es un hecho criminal y un atentado contra la vida. Esto genera indignación”, señaló.
En este acto de conmemoración también habló el jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, Luis Lara, quien también llamó a la unidad y recordó la misión fundamental de los militares de proteger el territorio y garantizar los derechos de los ciudadanos.
En las tribunas estuvieron la ministra de Gobierno, María Paula Romo, y el jefe del Gabinete Juan Sebastián Roldán. Las autoridades se ubicaron a dos metros de distancia como parte de los protocolos de seguridad y utilizaron mascarillas. El alcalde de Quito, Jorge Yunda, y el presidente de la República, Lenín Moreno, no asistieron a este acto castrense.