El presidente Rafael Correa convocó ayer oficialmente a reunión de la Unasur. El texto dice: “Frente a la ruptura de las relaciones entre Venezuela y Colombia con el objetivo de fortalecer el diálogo y la paz en la región, y atendiendo al pedido del Gobierno de la República Bolivariana de Venezuela dispuso al canciller Ricardo Patiño que convoque a una reunión extraordinaria del Consejo de Cancilleres de Unasur para la próxima semana, en Quito”.
Mientras tanto, el secretario general de la Unasur, Néstor Kirchner, se reunirá en Venezuela con el presidente Hugo Chávez, y luego en Colombia con el mandatario Álvaro Uribe, y con el electo Juan Manuel Santos, para mediar en la crisis bilateral.
El clima de tensión aumentó ayer. Las FF.AA. venezolanas anunciaron que están listas para repeler un eventual ataque, en un claro apoyo al presidente Chávez, luego de que rompió los lazos con Bogotá.
En ese sentido, la misión del argentino Kirchner tiene el objetivo de reducir la crisis.
También el mandatario brasileño, Lula da Silva, asumirá un papel activo en la mediación, para sacar el tema del ámbito de la OEA, la cual está liderada por EE.UU.
Para el régimen del boliviano Evo Morales (aliado de Chávez), un mejor escenario para el diálogo pudiera ser luego de la posesión de Santos, como presidente. Eso ocurrirá el 7 de agosto próximo.
Mientras tanto, Francia y España enviaron sus buenos oficios para que se termine la crisis entre las naciones sudamericanas.