Una mujer de Manabí o Guayas está en la mira de Alberto Acosta, precandidato presidencial por la Coordinadora Plurinacional de las Izquierdas. Sin dar nombres, Acosta apunta a llegar a Carondelet con una vicepresidenta de alguna de esas provincias.
“Mantengo esa tesis pero no se ha hablado absolutamente nada al respecto. Eso discutiremos cuando tengamos las firmas listas”, dijo el líder de Montecristi Vive durante su recorrido en Guayaquil, hace una semana.
Pachakutik y MPD, los pilares de la Coordinadora, no superaron la segunda revisión de firmas del Consejo Nacional Electoral (CNE). A la primera le faltaron unas12 801 rúbricas y a la segunda 23 172 para asegurar su participación en los comicios.
El próximo lunes acaba el plazo para que completen las firmas. Hasta esa fecha, el rostro que acompañará a Acosta en la papeleta será una incógnita. Sin embargo, bajo la tesis del precandidato presidencial, se barajan tres nombres: Martha Roldós, María Leonor Jiménez y Mery Zamora.
Las dos primeras pertenecen a Guayas, la provincia con mayor electorado a escala nacional, y la última a Manabí, la tercera con más votantes. Según la página web del CNE, registran en su padrón 2 658 712 electores y Manabí, 1 088 099.
Según el analista político Simón Pachano, la tesis de Acosta responde a una vieja estrategia electoral. “El binomio presidencial siempre se ha conformado por un serrano y un costeño porque tratan de mantener el equilibrio regional”.
Agregó que la fórmula no distingue ideologías. Además que a los partidos “no les ha ido bien” cuando ignoran esa estrategia.
Como ejemplo de fracaso recordó el binomio de los costeños Ángel Duarte y Teresa Minuche (1988) por la Concentración de Fuerzas Populares (CFP). Ese año obtuvieron el 7,9% de los votos, ubicándose en el sexto lugar.
En cambio, Pachano citó la dupla del guayaquileño Abdalá Bucaram y la cuencana Rosalía Arteaga para probar el éxito de la estrategia. En 1996, ese binomio ganó en la segunda vuelta con el 54,47% de aprobación.
Anunciata Valdez, subdirectora de la organización Participación Ciudadana, coincide en que la tesis de Acosta responde a una fórmula electoral. Su objetivo: captar el voto de mujeres y costeños.
Sin embargo, sostiene que la inclusión del género no debería ser solo cuestión de estrategia. “La Constitución reconoce que en todos los procesos eleccionarios, cuando tenga que elegirse a más de una persona haya paridad”. Bajo esa lógica, Valdez considera que los binomios presidenciales deberían respetar esa regla.
Además, considera que Roldós, Jiménez y Zamora tienen posibilidades como candidatas. “Son mujeres que no han agachado la cabeza al Gobierno de turno. Merecen cualquiera de ellas estar de candidatas y ganar”, expresó.
Militantes de la misma Plurinacional reconocen la notoriedad de las tres posibles candidatas. Juan Vizueta, precandidato para la Asamblea por Pachakutik y dirigente del gremio de abogados, las cataloga como “luchadoras sociales”. Resaltó que Jiménez ha impulsado la reivindicación social de su género, Roldós ha defendido los derechos de la naturaleza y Zamora tiene un rol dentro del magisterio. “Todas tienen sus méritos, no podría decir que una es mejor que otra”, expresó.
Las tres mujeres de la Costa estarían dispuestas a asumir la candidatura siempre y cuando cuenten con el apoyo de la Plurinacional (ver recuadros).
Sin embargo, Lourdes Tibán, asambleísta por Pachakutik; Humberto Cholango, presidente de la Conaie; y Lenin Hurtado, dirigente del MPD; prefieren no hablar de precandidatos y aseguran que completarán el binomio en consenso. Tampoco mostraron su apoyo a la tesis de Acosta.
“No se va a poner por poner a una mujer de la Costa o de la Sierra o de Saquisilí como yo digo, hay que poner gente que verdaderamente se comprometa por un proyecto político”, expresó Tibán durante la recolección de firmas en Guayaquil. En cambio, Hurtado se limitó a decir que optarán por “la mejor opción” luego de ser reconocidos por el CNE.
La lucha por las firmas
Hasta el 24 de septiembre próximo las agrupaciones políticas pueden entregar firmas al Consejo Nacional Electoral (CNE) para que sean aprobadas y participar en los comicios del 2013.
Al Movimiento Popular Democrático (MPD) le faltan 23 172 rúbricas para completar su inscripción en el CNE. En la última revisión registraron 134 773 firmas válidas.
También el movimiento Pachakutik necesita más firmas para su aprobación. Le faltan 12 801 firmas para superar el proceso. Registró 145 145 rúbricas válidas en la última revisión del CNE.
Mery Zamora, del magisterio
“Hombres y mujeres de la izquierda revolucionaria estamos listos para los retos que nos entreguen”, dijo Mery Zamora al preguntarle si aceptaría o no acompañar a Alberto Acosta en el binomio presidencial del 2013.
Zamora actualmente tiene un juicio en su contra por su supuesto terrorismo y sabotaje cometido presuntamente durante la revuelta policial del 30 de septiembre del 2010. Sin embargo, esto no la alejó de su lucha gremial.
Este año fue electa subdirectora nacional del MPD. Es asambleísta alterna de Jorge Escala, legislador nacional de la agrupación. En el 2004 llegó a la Presidencia de la Unión Nacional de Educadores de Manabí. Se graduó como profesora de educación primaria en el Instituto Superior Pedagógico 23 de Octubre.
En las elecciones del 2006, el 6,11% en Manabí apoyó su candidatura al Congreso Nacional, pero el MPD no obtuvo escaños en esa provincia. En el 2007 intentó llegar a la Asamblea Constituyente por Manabí; pero tampoco consiguió esa dignidad.
Leonor Jiménez, una jurista
María Leonor Jiménez cree que Alberto Acosta es el precandidato “transparente”. Varias reproducciones de la Constitución de Montecristi, cuya Asamblea fue presidida por Acosta, están en distintos sitios de su oficina, en el centro de Guayaquil.
Luego que dejó la Presidencia de la Corte del Guayas, puesto que ocupó en dos períodos, trasladó decenas de sus libros al despacho particular. El 22 de noviembre pasado fue destituida por haber llamado “golondrinas” a los jueces temporales.
“Desde cualquier puesto que me ubiquen estaré presta a colaborar”, expresó Jiménez al preguntarle si aceptaría la candidatura para la Vicepresidencia.
Reconocida por sus ideas de izquierda, desde fines de los 70 labró su carrera jurídica. Fue jueza de Tránsito, jueza VII de lo Civil, jueza IV de lo Penal, también fue magistrada de la IV Sala Integral y la II Sala Penal… Es la madre de la asambleísta Cynthia Viteri (Madera de Guerrero).
Martha Roldós, una activista
En el 2009, Martha Roldós fue candidata a la Presidencia con su movimiento Red Ética y Democracia (RED). Ese año quedó en cuarto lugar con el 4,33% de los votos; Rafael Correa ganó en primera vuelta. En caso de conformar el binomio con Acosta sería la segunda vez que trata de llegar al Palacio de Carondelet.
En el 2007 fue electa asambleísta por Guayas con el 1,85% de los votos. Es la hija del ex presidente Jaime Roldós Aguilera. Se graduó de economista en la Universidad Católica de Santiago de Guayaquil. Al preguntarle si se veía como la candidata de la Plurinacional hacia la Vicepresidencia dijo “esa no es una decisión personal sino grupal”.
Sin embargo, el viernes pasado durante la marcha hacia el CNE se puso la bufanda de colores y firmó por Pachakutik “a nombre de la democracia”. El martes, en Guayaquil, dijo que “no vamos a permitir esta maniobra tramposa de quienes nos quieren impedir llegar a las elecciones. Si somos cuatro gatos ¿por qué nos tiene miedo el presidente Correa?”.