Con dos votos a favor y un voto salvado, la Primera Sala Penal de la Corte Provincial de Pichincha ratificó la sentencia al coronel Rolando Tapia, ex jefe de la Escolta Legislativa, y a otros cinco policías, por atentar contra la Seguridad Interna del Estado.
El general (r) Jorge Villarruel fue la sorpresa de este Tribunal al salvar el voto. Los otros dos integrantes de la sala, Marco Maldonado y Patricio Arízaga, ratificaron la sentencia, luego de analizar el recurso de apelación que presentaron Tapia y los policías Mario Flores, Patricio Simancas, Marco Tibán, Carlos Tasinchana y Francisco Noboa. Los seis uniformados fueron sentenciados, en primera instancia, por el Tribunal II de Garantías Penales de Pichincha por los hechos del 30-S.
Se les acusa de haber impedido el ingreso de los legisladores a la Asamblea. Tapia fue declarado culpable y condenado a tres años de prisión, en calidad de autor. Simancas y Flores, a 18 meses por ser cómplices. Y un año de cárcel para Tibán, Tasinchana y Noboa por ser encubridores. La Sala que ayer ratificó este fallo, se tomó siete días para resolver.
Los defensores de las partes acusadas llegaron cerca de las 15:35 a la Corte de Pichincha, la cual tuvo poco resguardo policial y poca presencia de familiares y amigos de los acusados.
La audiencia, suspendida el pasado 19 de octubre, se reinstaló a las 16:05, por el presidente de la Sala, Marco Maldonado. El Juez inició con un breve recuento del rechazo del recurso de nulidad de la causa presentada el mismo día de la audiencia.
Maldonado fue enfático en sus declaraciones y señaló que la Sala no era competente para agravar la pena ya dictada. Pero explicó que sí han encontrado pruebas para ratificar la responsabilidad de los cargos que se los acusa.
Luego fue el turno de Villarruel, quien sustentó su voto salvado en que los actos son delito de función y no de orden penal contra la Seguridad Interna del Estado.
Villarruel dijo, como parte de su argumentación, que no encontró evidencia alguna en las declaraciones presentadas, sobre tal delito y propuso una rebaja de pena a un año de reclusión menor.
La lectura total del fallo duró apenas 20 minutos, y cerca de las 16:30 el Coronel, junto con los otros dos policías detenidos ya 13 meses, Simancas y Flores, salieron de la Corte. Tapia se mostró complacido y “con esperanza por el voto salvado del juez Villarruel”. En su opinión, “eso demuestra que no he tenido participación en los actos de los que se me quiere inculpar”. Tapia aseguró también que continuarán con la causa al recurso de casación.
Su abogado defensor, Víctor Cevallos, afirmó que “al menos uno de los jueces no pudo ser comprado por el Gobierno”. Cevallos aplaudió la actitud de Villarruel y aseveró que eso demuestra que aún existen “jueces probos”. Sin embargo, también denunció que “a pesar de que la audiencia era de carácter reservada se permitió la entrada de varios funcionarios del Ministerio de Justicia”.
El fiscal distrital a cargo del caso, Miguel Jurado, declaró que respeta el voto salvado del magistrado Villarruel, pero afirmó que se ratifica la sentencia con un voto mayoritario de dos a uno.