Los gobiernos de Ecuador y Francia dieron por superado el reciente incidente bilateral luego del molesto reclamo del presidente Rafael Correa del sábado pasado. Ese día, el Mandatario cuestionó que el Consulado de Francia en Quito haya dispuesto la suspensión de clases, el viernes, en el colegio La Condamine, a propósito de los homenajes en Quito por el 30-S. Si bien ese día el colegio sí abrió sus puertas, Correa calificó de un “abuso” dicha decisión, pues una orden de esa naturaleza solo la puede dar el Ministerio de Educación. Correa, incluso, amenazó con expulsar esa misión del país si esto se vuelve a repetir.
Desde París, el Gobierno francés atribuyó a un “malentendido” este incidente que “ ya ha sido disipado”. Según el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, Bernard Valero (foto), ese día “solo se dieron consignas de prudencia a los profesores y los alumnos debido a la manifestación” en las cercanías del establecimiento.
Tras las explicaciones, el vicecanciller Kintto Lucas dijo de parte de Ecuador que este es un problema superado y que no se volverá a hablar del tema.