Con sus mandiles blancos, imagen característica de los estudiantes de la educación pública, un niño de la escuela República del Ecuador apuntaba hacia Rafael Correa. “Miralo, ese es”, decía uno de ellos a un compañero, quien enseguida le bajó el brazo. “No apuntes con el dedo”, le respondió el otro niño.
Era el comienzo de una jornada en la que el Mandatario ecuatoriano fue el centro de atención. Correa estuvo en Buenos Aires antes de partir hacia Mar del Plata en donde participa de la XX Cumbre Iberoamericana.
La de ayer fue una agenda apretada. Al develamiento de la estatua de Manuelita Sáenz, en el parque de la Mujer en Puerto Madero; siguió la entrega del doctorado honoris causa de la Universidad de Buenos Aires (UBA). También hubo un almuerzo en su honor de la Cámara Argentino Ecuatoriana de Comercio e Industria. Luego vino la presentación de su libro ‘De la Banana Republic a la No República’ y, al final, una conferencia de prensa.
Así como los niños, en el aula magna de la Facultad de Derecho de la UBA, los universitarios vivieron su propio encuentros junto al Presidente. Cantaron la marcha peronista, mientras Correa levantaba la V de la victoria, señal característica de esta corriente política argentina.
Tanto en la UBA, como en la presentación del libro en donde se reunió con los intelectuales y artistas de Buenos Aires, el Mandatario definió ante los argentinos su postulado económico.
“En las universidades, la carrera se llamaba antes Economía Política, pero luego la quisieron convertir en una ciencia positiva. Pero olvida el término política, porque en el fondo todo es relaciones de poder”, resumía el Mandatario en las dos reuniones de ayer.
Fue también una jornada en la que los argentinos que fueron a verlo, buscaban respaldarlo por los hechos del 30 de septiembre y en la reafirmación de la cláusula democrática, dentro de la Cumbre Iberoamericana. Según Correa, esta va “a ser en los mismos términos de dureza que en la de Unasur”. “Debe haber tolerancia cero. Hay cosas innegociables como la democracia. No podemos tener un doble discurso como en Honduras: se rasgaban las vestiduras, pero dejaron pasar el tiempo, reconociendo el mal menor, a un gobierno ilegítimo. Debe haber mucha radicalidad frente a los golpes”, insistió.
Los asistentes lo aplaudían insistentemente. No tocó mucho el tema de la prensa, aunque dijo que es la única que cree que solo hubo una sublevación en Ecuador . También se refirió al escándalo de los Wikileaks.
“Estamos haciendo estudio de los miles de documentos para tener una reacción, en el sentido de que se ha querido manipular a la región. Se ve un poco la visión de EE.UU. hacia sus vecinos que presumíamos y ahora se ha confirmado, dijo.
Correa partió luego a Mar del Plata para participar de la XX Cumbre de Iberoamérica.
Sin resultado en Unasur
La Unasur postergó ayer en Mar del Plata la designación del sucesor del ex presidente argentino Néstor Kirchner como Secretario General del bloque.
Las deliberaciones se realizaron sin alcanzar un consenso. A este puesto al que aspiran candidatos de Colombia y Venezuela. Según versiones diplomáticas se trata de la ex canciller María Emma Mejía y del ministro de Energía del presidente Hugo Chávez, Alí Rodríguez. Las deliberaciones continúan hoy con la presencia de los primeros mandatarios.