La normativa contempla que los viajeros que arriben a los aeropuertos internacionales del país se sometan a una prueba PCR, para luego estar aislados en un hotel durante 48 horas. Foto: Archivo / EL COMERCIO
El Comité de Operaciones de Emergencia (COE) Nacional trabaja en un plan denominado Viajero Seguro, para reducir el tiempo del Aislamiento Preventivo Obligatorio (APO) que deben cumplir los ciudadanos que deseen ingresar a Ecuador, en medio de la emergencia sanitaria por el coronavirus.
Así lo anunció María Paula Romo, ministra de Gobierno, durante el Gabinete Ampliado que se efectuó este viernes, 17 de julio del 2020, en Salinas.
La normativa contempla que los viajeros que arriben a los aeropuertos internacionales del país se sometan a una prueba PCR, para luego estar aislados en un hotel durante 48 horas, hasta tener el resultado del test. La funcionaria explicó que actualmente el tiempo del APO es de siete días.
“Esto va a facilitar el intercambio, sin que nos relajemos en el tema de salud, porque vamos a aplicar exámenes que podrían estar listos en 48 horas”, mencionó Romo.
La idea del Gobierno es que una vez que entre en vigencia el plan, las agencias turísticas puedan programar visitas, dentro de varias semanas, pero con una “condición diferente y con todos los sellos de seguridad y bioseguridad”.
La ministra de Gobierno dijo que este plan se ha discutido con los alcaldes de Quito y Guayaquil. “En ambos casos están de acuerdo y a la expectativa de que se implemente el plan”. En la norma, que se implementaría la próxima semana, trabajaron los ministerios de Salud, Turismo, entre otras dependencias del COE Nacional.
Romo también habló del control que se reforzará en siete zonas de Quito, donde se registra aumento de casos de coronavirus. Para esta tarea se dividirán la vigilancia. La Policía Nacional resguardará tres sectores, las Fuerzas Armadas dos, y el Municipio las dos parroquias restantes, según la Ministra.
Esta vigilancia por zonas también se analiza para otras ciudades del país. El COE Nacional, además, remitió una carta a los 221 municipios, para pedir información sobre qué alcaldías ya expidieron la ordenanza de control de mascarillas.
Las autoridades revisarán la medida que permite reuniones de hasta 25 personas en ciertos cantones, pues según Romo, en muchos sectores se ha malinterpretado esta posibilidad, haciendo fiestas o eventos grandes, lo cual no está permitido. “Se autorizaron reuniones de trabajo, pequeñas reuniones familiares, pero se ha mal interpretado”, comentó.
