La fiscal Stella Maris Cano, a cargo del caso, dijo hoy que el video que muestra al canciller de Venezuela, Nicolás Maduro, ingresando en una sala de reuniones con militares paraguayos no fue trucado, aunque no contiene lo tratado en la ocasión.
Maduro fue acusado por el gobierno paraguayo de reunirse con los más altos jefes militares de este país durante el juicio político que le seguía el Congreso al presidente Fernando Lugo, y les “arengó” a respaldar al mandatario cualquiera sea el resultado de ese enjuiciamiento.
Maduro se encontraba en ese momento en Asunción junto con una delegación de cancilleres de la Unasur que llegó justamente para tratar de impedir que el Congreso desalojara a Lugo del poder, lo que sin embargo finalmente ocurrió.
En vista de que varias voces, inclusive la del gobierno venezolano, calificaron la filmación como trucada, la fiscal Cano afirmó hoy que cuenta en su poder con el disco duro del circuito cerrado del Palacio de Gobierno que realizó las tomas donde aparece Maduro.
En la filmación, proporcionada por la ministra de Defensa María Liz García, se ve a Maduro y otras personas ingresando a una sala donde también ingresaron los militares paraguayos.
“Pero no se puede confirmar si hubo o no arenga (de Maduro) a las fuerzas militares” para apoyar a Lugo, dijo sin embargo la fiscal, aclarando que en la sala de reuniones no había ni imagen ni audio.
Reiteró que ese testimonio lo confirmarán o desmentirán los altos jefes militares participantes del encuentro, sobre quienes informó que serán llamados a declarar próximamente.
A raíz de este hecho, el gobierno declaró “persona no grata” y ordenó la expulsión del embajador de Venezuela en Asunción, Javier Arrué.
La primera denuncia oficial sobre Maduro fue hecha por la ministra García, quien dijo que Maduro “arengó” a los militares paraguayos a reconocer solo a Lugo, y afirmó que el canciller venezolano estuvo acompañado en la ocasión por el embajador de Ecuador en Asunción, Julio Prado.