Dos opositores. Luís Fernando Torres y Ramiro Aguilar, conversan en la entrada al Pleno. Foto: María Isabel Valarezo / EL COMERCIO
Mientras el oficialismo afina la ruta que tomará dentro de la legislatura hasta final de año, la oposición busca la manera de tener mayor visibilidad en esta nueva etapa.
Para la minoría la característica común durante los 15 meses de labor en la Asamblea Nacional ha sido una escasa apertura a sus propuestas, la incapacidad de incidir en la agenda legislativa y la falta de un proyecto político conjunto. Para legisladores del oficialismo la labor de la oposición durante estos meses ha sido pobre, con escasos proyectos de ley presentados y falta de una agenda política programática.
Para esta nueva etapa, el escenario no será distinto. Los legisladores de Alianza País ratificaron que acelerarán su proyecto político e imprimirán la agenda establecida desde mayo del 2013. Así, 17 enmiendas constitucionales y leyes como la de Tierras y el Código Laboral recibirán la atención mayoritaria. En este ambiente adverso, la minoría deberá jugar con las mismas cartas.
¿Está derrotada la oposición?
Sus representantes aseguran que no, pues más allá de la poca incidencia que puedan tener sus propuestas en el Pleno y en la redacción de las normas, su punto fuerte radica en la opinión pública y en el mensaje que transmiten a la ciudadanía. “No hemos bajado la guardia, debemos seguir resistiendo a nivel interno de la Asamblea y fortalecer nuestra presencia en la opinión pública, hay que aprovechar el desgaste que tiene el Régimen”, dice Lourdes Tibán (Pachakutik).
Uno de los argumentos de Alianza País para desacreditar la labor de la oposición ha sido la supuesta escasa participación de sus legisladores. Sin embargo, un informe cuantitativo del Observatorio Legislativo (mayo del 2013 a mayo del 2014) dice lo contrario.
Entre otras cosas, el documento recoge los nombres de los cinco legisladores que más intervenciones han tenido en el Pleno. En la oposición se destacan tres asambleístas. “En aquellas leyes que tienen interés político ni siquiera el bloque Alianza País tiene poder de influencia sobre los textos pues ya vienen direccionados”, dice Ramiro Aguilar (Independiente). Él considera que dentro del trabajo legislativo no político ellos pueden tener cierto grado de influencia a través de las recomendaciones, pero que en el manejo político su voz no tiene eco.
“En este escenario, mi tarea como opositor es utilizar el espacio para trasladar puntos de vista que cuestionen el modelo estatista y controlador del actual Régimen”, dice Luis Fernando Torres (CREO-PSC-Cambio) a la vez que ratifica que su estrategia será fortalecer su presencia en los medios de comunicación.
Otra de las críticas de oficialistas como Paola Pabón o Virgilio Hernández es que desde las minorías se ha utilizado una estrategia de ataque y desgaste político a las propuestas presentadas por el oficialismo.
A esto se suma una escasa presencia de ciertos legisladores opositores durante las sesiones del Pleno y en las comisiones. “Hay asambleístas que no vienen un mes y luego hacen una intervención histriónica, tienen la atención de los medios y aparentemente hacen oposición”, dijo Pabón.
El informe del Observatorio Legislativo recoge los nombres de los asambleístas con más ausencias durante las votaciones del Pleno. En esta lista están cuatro legisladores de oposición. Andrés Páez (CREO) asegura que las ausencias del Pleno han sido justificadas y que sus alternos han actuado en estas ocasiones. Asegura que esto no significa que exista desinterés en los temas y para sostener su aseveración lo hace con datos. Contó que durante este período legislativo ha presentado siete proyectos de ley, de los cuales seis han sido archivados. Torres asegura que en las actuales condiciones no es fructífero presentar proyectos de ley, pues estos no pasan el filtro del Consejo de Administración Legislativa (CAL). “Con una agenda preestablecida, tratar de que se apruebe el proyecto de un legislador opositor es una aventura”.
El informe del observatorio Legislativo revela la poca aceptación a las propuestas de las minorías: durante el período analizado, el CAL recibió 57 iniciativas de ley de las cuales 13 fueron de la Función Ejecutiva, 41 de la Legislatura y tres de otras funciones. De las correspondientes a los Asambleístas, el 73% de iniciativas fue de asambleístas de oposición, pero ninguna ha sido aprobada.
Hernández reconoce que existen opositores cuyos aportes son valiosos para el oficialismo, pero también asegura que existen legisladores que no presentan alternativas serias a su proyecto político. “Hay asambleístas que presentan proyectos de un artículo, sin sustento. No hay una estrategia ni un trabajo responsable para devengar el sueldo”.
Como una muestra de la unión de la oposición, los legisladores presentarán una resolución conjunta en el Pleno del martes 26 de agosto.