Moscú cuestiona el cumplimiento por Londres de los principios diplomáticos, en un momento en que el futuro de Julian Assange continúa siendo incierto a pesar de que Ecuador le concedió el asilo, declaró este viernes el ministerio ruso de Relaciones Exteriores en un comunicado.
“Lo que está pasando nos empuja a cuestionar el respeto del espíritu y de la carta de la Convención de Viena sobre las relaciones diplomáticas, en particular de su artículo 22 sobre la inmunidad de las instalaciones de las representaciones diplomáticas”, declaró el ministerio.
Ecuador concedió el jueves el asilo a Assange, refugiado en su embajada desde el 19 de junio al considerar que su vida correría peligro si fuera extraditado a Suecia, donde está acusado de haber cometido crímenes sexuales, algo que él niega.
El ministro británico de Relaciones Exteriores, William Hague, declaró que Reino Unido estaba “decepcionado” por esta decisión y confirmó que tenía “la obligación” de extraditarle a Suecia.
Reino Unido aludió a una ley de 1987 por la cual estaría autorizado a entrar en las instalaciones de la embajada de Ecuador, eliminando su estatus diplomático, pero esta ley nunca fue utilizada.
El gobierno ecuatoriano no descarta acudir a la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya para obligar a que Gran Bretaña deje marchar hacia Ecuador a Julian Assange, fundador de Wikileaks, un portal web especializado en la divulgación de documentos confidenciales.
Por otro lado, la diplomacia rusa recordó que Gran Bretaña proporcionó asilo a “decenas de sospechosos de delitos graves”, entre los cuales se encontraban numerosos rusos.
Moscú reprocha a Londres el asilo político proporcionado a varios rusos, entre ellos el multimillonario exiliado y opositor al Kremlin Boris Berezovski.