El capítulo de Producción Nacional desarrollado en la propuesta de Ley de Comunicación, a criterio de los canales de televisión y de las radios, no es claro. El objetivo de la ley, si se aprueba hoy, es que en los próximos cinco años todos los medios cuenten en sus parrillas con el 40 y el 50% de producción nacional.
Sin embargo, el tema, tal y como se aborda en el proyecto de ley, presenta al menos cinco vacíos.
Uno, las disqueras internacionales, que mantienen el control de la parrilla musical en las radios, no se toman en cuenta en la ley. El segundo vacío tiene que ver con las radios que operan como franquicias en el país. Un tercer tema es que no se desarrolla a profundidad el concepto de radios temáticas. Como cuarto aspecto está, según los medios consultados por este Diario, las dificultades económicas para hacer producción de calidad. Finalmente, la propuesta legal no toma en cuenta que el mercado ecuatoriano tiende, por costos y aspectos tecnológicos, a hacer una programación popular de baja calidad.
En cuanto a las disqueras que son las que pautan y obligan a las emisoras locales a transmitir música de ciertos artistas, no están reguladas en la propuesta de ley.
Darío Castro, músico nacional, explica que el país sí tiene producción de calidad para cumplir el artículo 108 de la propuesta de ley, que dice que deberán colocar 50% de producción nacional en sus parrillas. Pero “las que dan los ingresos por pautar cierta música son las disqueras y estas no auspician a artistas nacionales”, dice.
Esta preocupación se extiende a emisoras como La Metro. Esta transmite solamente música rock, por lo que debería ser caracterizada como radio especializada. Si es así, no deberá cumplir el artículo 108. Pero en la propuesta no se determinan las características que deben tener las radios para estar dentro de esta clase.
Otras emisoras que tampoco están previstas en la ley son las franquicias, como Radio Disney. Representantes de esta cadena dicen que tienen un 45% de radio escuchas nacionales. Ellos aseguran que la parrilla que transmiten debe estar aprobada por la oficina central en Argentina.
El cuarto punto se refiere a la falta de recursos para la producción nacional que afecta a que el 40% de la parrilla de los canales sean programas locales. Este porcentaje se determina en el artículo 102. Además, se obliga a que de ese total, 10% sea proveniente de producción independiente.
Luis Cucalón, gerente de producción nacional de Teleamazonas, asegura que un programa ecuatoriano cuesta en promedio USD 12 000 por hora producida. Este costo es muy elevado para los espacios de producción locales.
Por ello, en la actualidad, el 30% de programas, según un conteo en las parrillas de los canales, son los llamados enlatados. Es decir, una programación internacional que producen grandes cadenas. Estos programas cuestan la tercera parte que los nacionales.
De esta manera, los medios locales recuperan la inversión de su propia producción que se muestra limitada en la ley. El proyecto a ser analizado determina que los accionistas de un medio privado no podrán tener otros negocios con fines de lucro. No pasa lo mismo con los medios públicos que, según la ley, tienen cuatro vías de financiamiento: presupuesto del Estado, publicidad oficial, publicidad comercial y donaciones.
En promedio, los canales locales tienen entre el 35 y el 44% de producción nacional, pero el tema costos se conjuga con un problema tecnológico y de tiempo que los obliga a mantener programas con temas populares y, en especial, concursos y peleas de famosos, “esto sí se produce en el país”, dice Gustavo Cevallos, productor.