Guillermo Lasso visitó junto con su esposa el sector de sector de Cutuglahua, en el sur de Quito. Allí le regalaron un poncho rojo. Foto: Patricio Terán / EL COMERCIO
En el sector de Cutuglahua, en los límites de Quito y Machachi, en Pichincha, el candidato presidencial de la alianza Creo-PSC, Guillermo Lasso, arrancó la campaña para la segunda vuelta este martes 16 de marzo de 2021.
El presidenciable llegó acompañado de su esposa, María de Lourdes Alcívar, y de asambleístas del movimiento, mientras organizaciones indígenas y campesinos lo vitoreaban “Lasso, Presidente”.
“Nosotros promovemos el encuentro entre todos los ecuatorianos. Tenemos que dejar a un lado esa cultura del odio, de la división, del insulto, de la discriminación, del racismo”, dijo cuando subió a la tarima y tomó el micrófono.
Eran casi las 13:00 y en el lugar, rodeado altas montañas y también de cultivos de papas y maíz, los comuneros se ubicaron alrededor de una cancha de tierra para escuchar las ofertas de campaña.
Le regalaron un poncho de color rojo propio de los pueblos indígenas de Chimborazo y a su esposa otro de las nacionales de Cotopaxi, que habitan en el sector de Cutuglahua. El candidato también llevó un regalo para uno de los dirigentes y dijo que se trataba de lo que en quichua se conoce como randi-randi, o dando y dando en español.
“En nuestro gobierno vamos a trabajar para promover la inversión y la generación de empleo, inversión en obras de infraestructura, en caminos vecinales, en proyectos de riego parcelario, inversión con crédito a los pequeños agricultores, a los pequeños ganaderos, a los artesanos, al 1% de interés a 30 años plazo”, agregó Lasso.
Una comerciante le interrumpió al pedirle créditos también para este sector y otro por apoyo para acceder a vivienda. En su mayoría se identificaban como parte de la Unión de Organizaciones Indígenas de Cotopaxi (Unoric) creada hace 15 años y que agrupa a por lo menos 6 000 socios.
Lasso respondió a los pedidos. “En nuestro gobierno -dijo- vamos a dar de baja las pequeñas deudas de ustedes con Banecuador, el antiguo Banco Nacional de Fomento. Vamos a dar de baja de la central de riesgos, del buró de crédito a millones de pequeños deudores del Ecuador para que vuelvan a tener acceso al crédito, y puedan producir, generar ingresos para sus familias”.
Guillermo Lasso llegó a Cutuglahua acompañado de su esposa, María de Lourdes Alcívar, y de asambleístas del movimiento Creo. Foto: Patricio Terán / EL COMERCIO
También ofreció “crear el fondo del capital semilla para aportar a los emprendimientos nuevos de las mujeres y jóvenes ecuatorianos. Vamos a apoyar a los comerciantes, a los agricultores para que se reconozca el precio de sustentación de los productos agrícolas y no sufran de abusos”, acotó.
Los dirigentes comprometieron a Lasso para construir en el sector una Ciudad de la Interculturalidad, en unos terrenos que hasta hace tres años pertenecían al Estado. El sector cuenta con senderos de tierra y rústicas casas.
Antes de retirarse, Lasso también aseguró que en su Gobierno no habrá privilegios para la aplicación de la vacuna contra el covid-19. “Tenemos que exigirle al actual Gobierno que publique la lista de quienes se han vacunado”, añadió.