Han pasado 16 meses desde que la ministra de Transporte, María de los Ángeles Duarte, planteó un juicio por daño moral contrae los periodistas Juan Carlos Calderón y Christian Zurita por la publicación de su libro ‘El Gran Hermano’.
Pero, hasta el momento, el caso sigue en la etapa de pruebas. Esto, a pesar de que el ‘perdón’ del presidente, Rafael Correa, a estos autores, por esa misma publicación, en teoría significaba la vuelta de página de este capítulo del Gobierno: los millonarios juicios de Rafael Correa por temas de libertad de expresión.
El libro de Calderón y Zurita fue publicado como parte de la investigación que realizaron sobre los contratos que las empresas vinculadas con Fabricio Correa, hermano del Presidente, suscribieron con el Estado.
El juicio de Duarte era un proceso aparte del que presentó Correa. La demanda de la funcionaria se dio por un pie de foto. Allí los autores escribieron que durante la gestión de la ministra Duarte se negoció un contrato a favor de Correa, para “el movimiento de tierras para el programa estatal Socio Vivienda”.
Según la Ministra, ese contrato fue entregado luego de que ella saliera de la Cartera de Vivienda. Los periodistas rechazaron esta afirmación y aclararon que el contrato se gestionó cuando Duarte dirigía el Ministerio.
En marzo del 2011, Duarte les demandó por presunto daño moral. En el juicio pide una indemnización de USD 500 000.
En junio pasado, la Ministra entregó su juramento deferido en el que aseguró se siente “terriblemente agredida, porque estudié en un colegio católico, toqué el piano en la Iglesia, fui abandera, he estado siempre en el trabajo profesional, siempre honesto. Hace unos años estoy en el área de servicio público. He mantenido a mis hijos y mi familia”.
De allí que en febrero pasado, cuando se dio el perdón de Correa, donde también se zanjó el juicio contra diario El Universo, se abrió la interrogante sobre si Duarte también perdonaría a los periodistas. En el proceso que implantó Correa, los reporteros Calderón y Zurita fueron condenados, en primera instancia, a pagar USD 1 millón como reparación.
Las críticas a esa sentencia se centraron en los argumentos que la jueza del proceso presentó: “El Presidente es padre de familia y ha representado al Ecuador en distintos foros internacional (..)”.
El abogado de los periodistas, Ramiro Aguilar, aclaró que ellos no solicitaron ningún perdón de la ministra Duarte y que se defenderán “como dispone la Ley y demostraremos en Ley que no se cometió ningún delito”.
Según explicó el jurista, al momento falta que el Tribunal Contencioso Administrativo envíe una prueba pedida por la defensa. Luego de ello, el juez Vigésimo Primero de lo Civil de Pichincha, Rubén Giler, podrá fijar fecha y hora para la audiencia de alegatos y finalmente dictar sentencia.
Los periodistas enjuiciados esperan que este caso sea desechado, aunque temen que se repita lo sucedido en el juicio civil que presentó el Primer Mandatario a inicios de este año. En ese caso, no se acogió la explicación ni los justificativos de la defensa y solamente se valoró el cargo y las funciones del Presidente para la elaboración de la sentencia.
A pesar de ello, el abogado Aguilar aclaró que se pierda o se gane con este sistema de Justicia actual, “la ministra Duarte no tiene derecho a recibir ningún dinero, porque la demanda no tiene justificativos”.
El proceso sigue de momento congelado. No se sabe en cuánto tiempo más se destrabará.