En las elecciones de 2017, agentes metropolitanos hicieron controles en la capital. Foto: Archivo / EL COMERCIO
El jueves, 1 de febrero del 2018, fue el último día de campaña electoral. Los movimientos políticos y organizaciones sociales ya no pueden hacer proselitismo por ninguna de las opciones.
En los cierres de campaña hubo espectáculos artísticos, caravanas y recorridos con sus simpatizantes. Las principales actividades se concentraron en Quito y Guayaquil.
Ahora, con el silencio electoral en vigencia, a los ecuatorianos les quedan dos días para meditar su voto sobre las siete preguntas del proceso propuesto por el presidente Lenín Moreno, en octubre pasado.
El artículo 207 del Código de la Democracia establece que 48 horas antes de los comicios y hasta las 17:00 de ese domingo, queda prohibida la difusión de información dispuesta por las instituciones públicas, con excepción del Consejo
Nacional Electoral (CNE).
El detalle de esta prohibición, en cambio, está en el Reglamento sobre el control de la propaganda electoral.
Ahí se explica que es ilegal la difusión de cualquier propaganda electoral en los medios de comunicación, artículos promocionales o cualquier otro acto de carácter electoral, que induzca en los electores por una de las opciones.
También está prohibida la difusión de cualquier tipo de información en los medios sobre informes de labores, rendición de cuentas o gestión por parte de las funciones del
Estado, las instituciones públicas y las autoridades de todos los niveles de Gobierno.
Se castigará con una multa equivalente al 50% por ciento de una remuneración mensual básica unificada (USD 193) a quien haga propaganda dentro de un recinto el día de los comicios y quien haga propaganda durante el silencio.
Además, los medios de comunicación que incumplan este mandato legal podrán recibir una multa de entre USD 50 000 y USD 100 000. La prohibición solo rige para los medios tradicionales, es decir, prensa, radio y televisión. No para las redes sociales.
Desde el mediodía del 2 de febrero también regirá la denominada ley seca. El consumo y venta de bebidas alcohólicas, en todo el país, se controlará hasta las 12:00 del lunes 5 de febrero.
En el artículo 123 del Código de la Democracia se estipula que “durante el día de las elecciones, 36 horas antes y 12 después” hay veda de alcohol.
Quienes infrinjan esta norma recibirán una multa de USD 193. Las autoridades del control del cumplimiento la ley seca vigilarán que permanezcan cerrados los locales de expendio de licor.