Un traje formal para un candidato que está seguro que conseguirá una nueva victoria. “Lo mío no es la demagogia”. Augusto Barrera llegó al set de Grupo EL COMERCIO, para dar a conocer su plan de trabajo si gana la reelección este 23 de febrero. El Alcalde no llevaba ningún color alusivo a Alianza País. Vestía un traje azul y una corbata roja.
La guerra de versiones desatada a propósito de las encuestas no le es ajena. Y aunque asegura que él va en primer lugar, identifica perfectamente a su rival: Mauricio Rodas de la alianza SUMA-Vive, a quien le planteó ir a un debate este jueves en Teleamazonas.
Barrera niega que este desafío sea porque supuestamente él está segundo en las preferencias electorales. “El que quiere debatir es el que tiene respeto por la ciudad”. “Estamos bien en las encuestas, tenemos el voto más duro que cualquier organización”.
Una Alcaldía ‘política’ Uno de los principales temas que consta en el plan de trabajo de Barrera para los próximos cinco años es el de fortalecer la condición de capital que tiene Quito . Desde ese punto, Barrera ve una ciudad más incluyente, más tolerante y que viva en una profunda democracia.
Sin embargo, estos conceptos chocan cuando a Barrera se le pide reflexionar sobre su papel como líder de la ciudad en temas políticos profundos como el de las libertades o el llamado a la concertación nacional que pudo haber efectuado tras los hechos del 30-S. Al respecto, él señala: “he sido cuidadoso para que todas las formas de expresión en Quito funcionen”. “Mi voz en el Gobierno es clara en mi espacio de militancia interna que es el buró y externa cuando soy el alcalde”.
Aunque no cuestionó directamente al Régimen por la sanción impuesta al caricaturista ‘Bonil’, Barrera dijo que él era su amigo. “Yo hubiera esperado que no se llegue a esto pero lo que quiero decirle es que yo fomento en esta ciudad un mecanismo de concertación”.
Campaña 2009 vs. 2014
Al reflexionar sobre lo que fue la pasada contienda seccional y la actual, Barrera asegura haber ganado más experiencia y conocimiento sobre la ciudad. “Mi compromiso ético en esta contienda me obliga a mantenerme alejado de la “baratilla” del “otro” candidato.
Además, advierte que la campaña del 2009 estuvo cobijada por las elecciones presidenciales mientras que en la actual se puede debatir mejor los temas de la ciudad “y eso es positivo”.
Barrera no considera negativo que el presidente Correa, el exvicepresidente Lenín Moreno y otras figuras del Régimen como Carlos Marx Carrasco, del SRI, hayan salido a apoyarlo. “Yo soy el alcalde y tomo las decisiones de la ciudad pero somos un equipo y eso debemos expresarle a la gente, no somos una colcha de retazos ni un arcoíris mal hecho”.
Sus declaraciones se dirigieron nuevamente contra Rodas, asegurando que él sí tiene problemas para mostrar a su equipo, en referencia a los supuestos líos tributarios de su candidato a concejal Antonio Ricaurte. Él los ha negado y planteó una demanda por daño moral contra militantes de Alianza País que lo acusaron.
Obras y continuidad
Barrera dijo que hay mucha demagogia en esta campaña y que la ciudad tiene que elegir a un candidato que garantice el cumplimiento de las obras en marcha, con una visión de eficiencia y pragmatismo. En ese sentido aseguró que Rodas no quiere hacer el metro y que su propuesta para bajar impuestos solo beneficiarán a los grupos más poderosos.
Mi compromiso ético en esta contienda me obliga a mantenerme alejado de la baratilla del otro candidato. No me presto para eso”.