En la Iglesia San Francisco, Guillermo Lasso junto a su esposa recibieron la imposición de la cruz de ceniza. Foto: Mario Faustos / EL COMERCIO
Guillermo Lasso comulgó y recibió la imposición de la cruz de ceniza en el inicio de la Cuaresma. En una de las bancas de la tradicional Iglesia San Francisco, en pleno centro de Guayaquil, estaba acompañado de su esposa María de Lourdes Alcívar y dos de sus hijos, Santiago y Guillermo Enrique.
Llegó a la misa de las 11:00 en Miércoles de Ceniza, este 1 de marzo del 2017. Esa actividad personal no figuraba en la agenda que la sala de prensa de su campaña difundió en la víspera. Pero el candidato presidencial de la alianza Creo-SUMA sacó espacio para cumplir con esta tradición católica.
Se bajó del ‘Lassomóvil’, la furgoneta en la que se transporta en ocasiones, en la calle Pedro Carbo y Vélez y caminó menos de una cuadra hasta la plaza Vicente Rocafuerte donde se ubica la iglesia. Y apenas la gente lo vio se acercó para saludarlo y hacerle fotos.
Ya en la iglesia, el personal que lo acompañaba pedía que no se hicieran fotos, pero fue imposible evitarlo. Al final de la misa otros feligreses se acercaron para saludarlo a él y a su familia y para decirle ‘Lasso presidente’, ‘confiamos en usted’.
Como mensaje en este inicio de la Cuaresma dijo a este Diario que se trataba de un momento de reflexión y de paz.
El saludo espontáneo de la gente fue la tónica durante la mañana. A las 09:40 Guillermo Lasso llegó a la dulcería La Palma, en la calle Escobedo, también el centro del Puerto Principal. Su desayuno (de huevos fritos, pan, pastelitos, café y jugo de naranja) era interrumpido constantemente por personas que estaban en el lugar que buscaban saludarlo y hacerse fotos. A momentos se formó una fila de espera entre las que estaban muchas mujeres.
Ahí también tuvo que atender entrevistas con medios impresos, pues la agenda se había ajustado como para alcanzar a ir a su oficina en el edificio La Previsora. En la mesa lo acompañaban su hijo Santiago; Aparicio Caicedo, asesor político y jurídico; Daniel Coronel, su secretario; y, Roberto Izurieta, consultor de campañas electorales, que lo ha seguido desde la primera vuelta como su amigo personal.
En declaraciones a los medios dijo que los días después de las elecciones y del feriado de Carnaval han servido para voltear la página entre los líderes políticos que quieren el cambio en el Ecuador. “Es el momento de la reconciliación. Que aquel que votó por la 6 que le diga a su suegra ya no peleemos, estamos todos juntos. Los roces de un momento a otro quedaron atrás, ahora hay una página en blanco para que los líderes democráticos que queremos derrotar al socialismo del Siglo XXI nos unamos.
Escribamos la nueva historia del país. Todos unidos, 21, 3, 6, 10… juntos para defender la libertad en el Ecuador para que podamos vivir en un estado de derecho, libertad y sin miedo”.
Luego del feriado de Carnaval la mañana de este miércoles retomó su agenda pública con entrevistas a primera hora en radios de Guayaquil. Durante su intervención en radio Centro ratificó su agradecimiento a los líderes de otros partidos como el alcalde Jaime Nebot y le pidió “trabajar juntos”.
Según Lasso, dijo que ha aprendido a tener la serenidad de no ofender a nadie en las tarimas y a comprender que en ocasiones se dicen muchas cosas que no es el pensamiento definitivo, cuando le preguntaron si estaba dispuesto a aceptar los votos del socialcristianismo. “Hora de la unidad entre los demócratas, amantes de la libertad y queremos vivir incluso debatiendo nuestras diferencias, entre PSC y Creo hay muchas cosas que nos unen más que las que nos separan”.
Mencionó que de su “lado y creo que también del lado de Jaime Nebot hay que dar la vuelta a la página, pensar en el futuro del Ecuador, en la democracia y las libertades. Y derrotar en las urnas, no en las encuestas al Socialismo del Siglo XXI”.
Lasso destacó que se tomarán algunas de las propuestas de campaña de los excandidatos presidenciales como el plan de vivienda y ‘tablets’ para los jóvenes de Cynthia Viteri; el proyecto de agua potable para zonas rurales de Paco Moncayo. Y así enumeró a Washington Pezántez, Patricio Zuquilanda y por primera vez a Iván Espinel, ya que dijo tiene propuestas para los jóvenes del país.
Sobre dos encuestas que se difundieron durante el feriado y que le dieron una ligera ventaja sobre su adversario el oficialista Lenín Moreno, dijo que quiere mantener la coherencia con lo que dijo en primera vuelta. “Las encuestas son una herramienta técnica para tomar decisiones estratégicas en una campaña, las elecciones no se ganan con encuestas, sino con votos en las urnas el día de elecciones y ese será el 2 de abril que ganaremos con el voto de los ecuatorianos que quieren recuperar la democracia, que quieren el cambio y no llegar a ser un país como Venezuela”.
El candidato presidencial señaló que ha llevado una campaña limpia. Dijo que aquellos que “impulsan la campaña sucia, de la mentira, de lanzar latas de atún contra Creo y las oficinas del banco de Guayaquil, que nada tiene que ver en materia política, los revela claramente su espíritu violento, su poco nivel de tolerancia. Están ardidos porque no ganaron en primera vuelta. Es vergonzoso que el presidente saliente justifique actos de violencia y mucho peor que el Nicolás Maduro del Ecuador, el candidato de Alianza País, que hoy llame a eso libertad de expresión. Que tenga miedo que en el debate le lancemos buenas ideas para sacar adelante al Ecuador, ideas que él no tiene”.
Según Lasso, no cree que sea ofensivo que llame a Moreno ‘el Nicolás Maduro de Ecuador’, sino que representa a ese personaje en el país pues no quiere debatir y muestra su debilidad cuando le impusieron al postulante a la Vicepresidencia, Jorge Glas, que es el responsable político de los supuestos actos de corrupción en el país.