Guillermo Celi Santos, vocero Nacional del Movimiento SUMA, explica el futuro y los retos que enfrentan.
¿Qué implica que Ud. sea el vocero de SUMA?
Implica ser la voz del movimiento ante los medios y con los diferentes sectores sociales. Lo haré a través de un permanente recorrido por las provincias. También, reestructurar el movimiento en ciertas provincias.
¿Cuáles?
Esmeraldas, Azuay y Cañar, donde hay que generar mayor fuerza. También es importante Guayas. Si bien ganamos concejalías en Bucay, Naranjito, Marcelino Maridueña e Isidro Ayora, tenemos que hacer una gran labor en Guayaquil.
¿Qué espacio puede disputar SUMA en Guayaquil, si el dominio de Madera de Guerrero y Alianza País es total?
En muchas ciudades se decía lo mismo, pero ganamos en Quito, Portoviejo, Manta, Guaranda y otras localidades. Obviamente existe un bipartidismo entre los grupos de Jaime Nebot y del oficialismo. Pero, hay un nicho de oportunidades, ya que hay mucha gente que no ha tenido opción de demostrar su capacidad.
¿Qué papel jugará el Municipio de Quito en esta reorganización?
Es indudable que la Alcaldía de Quito es una gran vitrina que la asume nuestro líder Mauricio Rodas. En los primeros 100 días de la administración de los gobiernos locales de SUMA se va a reflejar un rumbo diferente.
¿No hay el riesgo de que las autoridades de SUMA sean cooptadas por el Gobierno, como pasó en el período que acaba?
¿Qué pasó con esos alcaldes y prefectos? Perdieron las elecciones. El pueblo es inteligente y votó por una opción diferente a la del oficialismo. SUMA está armando una plataforma para ayudar a sus gobiernos locales (…). Jorge Zambrano, nuestro alcalde en Manta, ya ha hecho declaraciones muy duras con relación a este proyecto de Ley de Ordenamiento Territorial. Ese borrador es atentatorio contra la autonomía y descentralización de los gobiernos municipales.
¿Una intención de recentralizar al Estado?
Por supuesto. Esteban Quirola gana en El Oro y con un decreto revierten las atribuciones del Prefecto en la Autoridad Portuaria de Puerto Bolívar.
¿Cuál es su lectura?
Luego de que ganamos las elecciones del 23 de febrero han surgido proyectos de ley y decretos para crear un traje a la medida del oficialismo. Cuidado que el poder está en el pueblo, no en el mandatario. No se pueden perpetuar en el poder tratando de cambiar normas y directorios para impedir que nuestros dignatarios hagan su trabajo efectivo.
¿Este es el inicio de una pugna con el Gobierno?
Espero que no sea así. Vamos a abrir los canales del diálogo y coordinación con el Gobierno central, pero sin sumisión ni subordinación. Lo que no vamos a permitir es que se disminuyan las potencialidades de las autoridades locales, que van a perjudicar a la ciudadanía. Siempre habrá una voz firme y respetuosa de SUMA.
¿Qué implica eso?
Socializar los temas, para que la comunidad conozca lo que se pretender hacer.
¿El movimiento impulsará un frente de oposición en este tema?
Es importante que las otras tiendas políticas emitan su criterio. Estoy seguro que los propios alcaldes de A. País están en desacuerdo con ese proyecto de ley, porque atenta contra el espíritu de la descentralización.
¿Cuál es la postura de SUMA sobre una reforma a la Constitución para, entre otros temas, ampliar la reelección?
Estamos contra una reforma en materia de reelección indefinida, que impide la alternabilidad. No es coherente que por los resultados del 23-F se pretenda hacer estos cambios, para coser un traje a la medida para perpetuarse en el poder.
Hoja de vida
Su trayectoria. Es doctor en Jurisprudencia de la Universidad Católica de Quito. Fue procurador síndico del Municipio de Portoviejo. Es vicepresidente nacional del movimiento SUMA y su vocero por encargo de la directiva.