Mientras los militantes del movimiento Nueva Universidad celebraron ayer la victoria de Carlos Torres, como el presidente de la Federación de Estudiantes Universitarios (FEUE) de Quito, otros no aceptaban su derrota.
Ayer, por primera vez después de 35 años de dominio político en la Universidad Central del Ecuador, el Frente Revolucionario de Izquierda Universitaria (FRIU) perdió las elecciones.“No es cosa de todos los días terminar con 35 años de hegemonía”, dijo Torres después de saber los resultados oficiales. “Resolveremos la crisis de participación estudiantil con una asamblea”, continuó el joven.
Su campaña se enfocó en quitar el dominio de partidos políticos como el Movimiento Popular Democrático dentro de la universidad. “No vamos a permitir ni que el FRIU ni que Alianza País ni que ningún partido quiera volver a convertir en su apéndice a la Universidad”, señaló.
Torres pertenece al movimiento Nueva Universidad, que se unió con Alianza Centralina Universitaria. El candidato logró 14 723 votos. El FRIU, en cambio, tuvo 7 495. Mientras que Óscar Montaño, de la lista Juventud Socialista Bolivariana (JSB), obtuvo 2 075 votos.
Los datos se divulgaron ayer, en el Teatro Universitario por la Comisión Electoral Estudiantil. Esta se conformó con cinco estudiantes de las facultades de Artes, Comunicación Social, Psicología, Medicina e Ingeniería.
Pero los integrantes del FRIU no aceptaron los resultados. Jaime Calderón, jefe de campaña del FRIU, y Franklin Hermosa (candidato) dijeron que se había anulado siete juntas electorales y que existen más de 4 000 estudiantes que no votaron.
A esto, Mónica Navas, de la Comisión, respondió que durante el conteo estuvieron los delegados de cada lista como testigos del proceso. “Todos estamos viendo lo que está pasando”.
En eso estuvo de acuerdo Wilmer Neira, de JSB, quien a pesar de criticar que las elecciones empezaron con una hora de retraso, dijo que hubo transparencia. “Todas las listas estuvimos en igualdad de condiciones. Se permitía que todos manipulemos las papeletas electorales con un miembro de la Comisión”.
Los estudiantes que no sufragaron el 22 de abril acudieron al recinto después de las 17:00, hora en que se acordó cerrar las urnas. El acta de conteo señala que se anularon seis juntas por razones como la falta del padrón. En la mayoría de esas urnas, dijo Alfredo Espinosa, secretario de la Comisión, los votos también favorecían a Torres.
El conteo se realizó sin interrupción desde el jueves a las 21:00. Las 90 urnas se trasladaron ese día al Teatro Universitario a causa de un incidente en el estadio de la institución, donde se planificó contar los votos.
A las 18:00 del jueves, varios miembros del FRIU se aglomeraron en la junta 64. Allí se escuchaba un grito común: “¡Fraude!”. Supuestamente se encontraron papeletas marcadas en el piso que favorecían a Carlos Torres, lo cual no se comprobó.
La joven que presidía la junta escapó del tumulto con el temor de ser golpeada. Los demás miembros de las juntas abrazaron las urnas para evitar que alguien las tomara a la fuerza. Eso retrasó el proceso del jueves y la Comisión Electoral solicitó el apoyo de la Policía para resguardar las ánforas. Lo cual también fue criticado por el FRIU.
Los militantes de este movimiento se instalaron desde el jueves fuera del Teatro Universitario para esperar los resultados. Incluso durmieron en el piso.
Sosteniendo banderas rojas y amarillas, gritaban insignias y aseguraban que el rector Édgar Samaniego había apoyado a la lista Nueva Universidad-Alianza Centralina. Ante esto, Samaniego señaló que eso es una falta de respeto para los estudiantes que participaron en el proceso.
Dijo además que se buscó “garantizar elecciones transparentes, evitar que se robaran las urnas y que hicieran los escrutinios en la clandestinidad”. Mientras que Torres dijo que asumía el reto de transformar la FEUE de Quito a través de participación.
Unas elecciones pospuestas
El 8 de diciembre del 2009, miembros del FRIU agredieron al rector de la Universidad Central, Édgar Samaniego. Se estaba resolviendo un plebiscito para cambiar el reglamento de las elecciones para elegir representantes estudiantiles.
El proceso electoral de junio del 2009 fue anulado porque se comprobó un fraude en los resultados. Daysi Terán fue proclamada presidenta de la FEUE de Quito por Marcelo Rivera, presidente de la FEUE nacional.
Los dos son integrantes del Frente Revolucionario de Izquierda Universitaria (FRIU).
Después de participar en el atentado contra el Rector, Marcelo Rivera, presidente de la FEUE nacional, fue detenido. Él permanece en la cárcel hasta hoy.
El plebiscito fue en enero de este año. Entre los cambios que se decidieron están los requisitos para ser representante estudiantil: tener una calificación mínima de 8 sobre 10 y estar matriculado en la Universidad.