En la comitiva que acompañó al presidente Rafael Correa a Argentina estuvieron 12 ministros, secretarios de Estado y funcionarios de otras entidades; dos asambleístas, un dirigente afroecuatoriano y una funcionaria de la Secretaría de Pueblos, que traduciría al idioma shuar, según consta en el Decreto Ejecutivo nro. 1367, del 3 de diciembre.
Entre la delegación oficial que acompañó al Mandatario ecuatoriano a recibir el Premio Rodolfo Walsh al “Presidente Latinoamericano por la Comunicación Popular ”, concedido por la Universidad de La Plata, apareció el fiscal general, Galo Chiriboga.
Esto, a pesar de que entre Quito y Buenos Aires no se suscribió ningún convenio de cooperación en materia judicial, según lo informó la Cancillería ecuatoriana.
La Fiscalía no ha emitido ningún pronunciamiento al respecto sobre esta participación, ni por qué estuvo en la comitiva.
Sin embargo, la presencia de Chiriboga no ha sido el único tema que ha levantado críticas.
Ayer, los diarios argentinos criticaron el discurso de Correa durante el evento en La Plata. Esto, porque el Jefe de Estado comparó el atentado contra la sede de AMIA, en la capital argentina en la década de los 90, con los bombardeos que ha protagonizado la OTAN en Libia.
“Conozco ese caso -por la AMIA-. Es muy doloroso para la historia argentina, pero vea cuántos murieron en el bombardeo de la OTAN a Libia. Comparemos las cosas también y veamos dónde están los verdaderos peligros; no debemos manipular”, señaló el Presidente en una entrevista concedida a un canal de TV.
Esto levantó las críticas de varios sectores sociales y políticos, que ayer fueron desplegadas ampliamente en los medios de comunicación argentinos.
El periódico La Nación recogió las reacciones de varias organizaciones sociales y de defensa de los derechos humanos, que aseguraron las expresiones de Correa eran “un insulto” para la comunidad judía y demostraba su “desprecio” a un pueblo abatido.
Asimismo, diario El Clarín publicó una nota en la cual se acusaba a Correa de “justificar” el atentado contra AMIA, que dejó 84 personas muertas.
El periódico Andes, de Buenos Aires, explicó que las declaraciones de Correa además, ahondaron la disputa que mantiene el Régimen de ese país con la comunidad judía. Incluso, el brazo política de ese pueblo, la DAIA, dialogó con el canciller argentino, Héctor Timerman, y cuestionó las negociaciones abiertas que mantiene Cristina Fernández de Kirchner con Irán.
El discurso de Correa fue similar al de Fernández en la Asamblea de la ONU, según el medio.
Incluso, el premio que recibió el Primer Mandatario ecuatoriano quedó relegado a segundo lugar, frente a la magnitud de sus declaraciones políticas. Esto, por el momento que se vive, en el que el conflicto en la Franja de Gaza todavía no se ha podido solucionar.