Dentro de urnas de vidrio se encierran las pertenencias de antiguos gobernantes del Ecuador. Más de 200 objetos están en el Museo de Presidentes, que se inaugurará hoy a las 10:30, en la vía Guayaquil-Samborondón.
Durante dos años, la Universidad de Especialidades Espíritu Santo (UEES) visitó a los antiguos mandatarios, sus familiares o amigos, en busca de los tesoros que guardaban. El museo se construyó en la planta baja de la biblioteca del centro de educación superior.
El viernes pasado, María del Pilar Briz, coordinadora de la Facultad de Derecho, ponía carteles con una breve descripción de cada objeto. Ella lideró la recolección de bienes. El más antiguo es una carta del ex vicepresidente José Joaquín de Olmedo a su padre. Una luz ligera iluminaba el papel amarillento que data de 1803.
Las pertenencias de cada Mandatario están ubicadas bajo su retrato. Tres bandas presidenciales y una del alcalde de Guayaquil también yacían bajo la luz. La más antigua de estas le perteneció al ex presidente Jaime Roldós Aguilera (1979-1981). Esa banda lo acompañó dentro del féretro durante su velatorio.
Las dos bandas tricolor restantes son de los ex presidentes Alfredo Palacio (2005-2007) y Gustavo Noboa (2000-2003). Ellos dos fueron los que más pertenencias donaron.
La banda celeste y blanco le perteneció al también ex presidente León Febres Cordero (1984-1988). En el museo reposa su bastón de mando, una corbata y un bolígrafo. Además hay una réplica del polémico busto que no pudo ser instalado en la Planchada, frente al barrio Las Peñas, por una orden judicial.
El rector de la UEES, Carlos Ortega, leía en voz alta sobre la aventura de Noboa a sus 17 años para obtener el autógrafo del ex presidente José María Velasco Ibarra en 1955. “Velasco estaba sorprendido por el pedido y dijo que era la primera vez que le pasaba algo así”, escribió de modo anecdótico, en una hoja, parte del museo.