Una pequeña carpa amarilla, instalada en la puerta de la Fiscalía General del Estado, es el hogar temporal de la familia Carrión-Orbe.
Desde ayer, a las 07:00, Janeth Orbe, esposa del coronel César Carrión, ex director del Hospital de la Policía, mantiene una huelga de hambre indefinida. La medida la tomó para exigir a los jueces del Quinto Tribunal Penal de Pichincha y a la Fiscalía que resuelvan pronto el caso del oficial.Carrión está acusado de supuesta complicidad en el aparente intento de asesinato en contra del presidente Rafael Correa, durante la revuelta policial del 30 de septiembre. Esto lo ha mantenido preso desde hace seis meses, en el penal García Moreno de Quito.
Por ello, su esposa dice que ya ha esperado demasiado y decidió actuar de otra manera. Esta vez, con una huelga de hambre.
“Ayer (miércoles) debía realizarse la diligencia de mi esposo, pero se suspendió porque el fiscal (Luis) Enríquez pidió vacaciones. Ahora quiero que se fije pronto una nueva audiencia y no se la dilate tanto. Todo esto lo han hecho porque no tienen argumentos para condenar a mi esposo”, señaló.
En la mañana, el fiscal general subrogante, Alfredo Alvear, conversó con Orbe y con el abogado Stalin López. Les pidió que levantaran la medida de protesta y que la Fiscalía está abierta a designar a un nuevo agente fiscal para que participe en la audiencia de juzgamiento. “Me pidió que confiara en él, pero yo ya no confío en nadie. Así que seguiré en esta huelga hasta tener por escrito la fecha de la nueva diligencia y lo más pronto posible”, dijo Orbe.
En un principio estaba previsto que la diligencia se realice el 16 de mayo, pero todavía no hay ninguna decisión en firme del Tribunal de Garantías Penales.
Orbe teme que la dilación se trate de un tema político, por la consulta popular prevista para el 7 de mayo, pero está convencida de que sea cual sea la fecha que se señale para la audiencia de juzgamiento, Carrión saldrá libre.
Sin embargo, Alvear aseguró que no se trata de ningún tema político, sino que simplemente depende de que los jueces del Quinto Tribunal fijen la nueva fecha para la diligencia judicial y la Fiscalía asistirá.
Mientras tanto, Orbe dormirá en la pequeña carpa con sus hijos y con uno de sus dos hermanos, que se turnarán para acompañarla y resguardar a la familia.
“No tengo con quién dejar a mis hijos en la noche, porque en la noche es el único momento que tengo para estar con ellos, así que aquí estaremos los tres juntos. En mi casa nos sentimos solos y ya me cansé de todo esto”, relató Orbe.
En la protesta la acompañan unos ocho familiares suyos y de su esposo. Con pancartas en la mano que tienen la foto del oficial y que dicen ‘Carrión, inocente’, se paran en la mitad de av. Eloy Alfaro para pedir respaldo a su causa.
Los transeúntes se detiene a mirar lo que sucede. Los vehículos que circulan por el lugar pitan en señal de respaldo y eso, añade Orbe, le da fuerzas para continuar en la lucha. No importa cuánto tiempo le tome ni lo que tenga que sacrificar, dice, para lograr que sus hijos se vuelvan a reunir con su padre.