En la avenida 9 de Octubre los mensajes por la defensa de la ciudad se multiplicaban. En las camisetas blancas y en los adhesivos se replicaba la frase: ‘El compromiso es contigo Guayaquil’.
Ese fue el eslogan que se difundió para la convocatoria de la marcha, liderada por el alcalde Jaime Nebot. Y en los carteles que aparecieron con las horas, se leían otros mensajes que hablaban de los motivos para protestar contra el gobierno de Rafael Correa.
Ayer la ciudad despertó con lluvia, pero esto no fue motivo para que la actividad en el centro se paralice. Temprano en la mañana terminó de instalarse el escenario para el discurso del Alcalde. La circulación vehicular se suspendió en la avenida Malecón desde la calle Sucre, a dos cuadras del Municipio, hasta la 9 de Octubre. Además, el tramo entre Pichincha y Pedro Carbo. A las 10:00 los preparativos hacían parecer un día festivo.
A un costado de la tarima un grupo de fornidos trabajadores municipales, con camisetas blancas, recibía instrucciones sobre cómo resguardar la seguridad de Nebot. Al tiempo que los comerciantes informales instalaban sus negocios. Las banderas se vendían a USD 3, los abanicos y gorras a 1. Además, se repartían banderines plásticos y adhesivos gratis…
El Registro Civil del Gobierno, bancos y demás almacenes de la 9 de Octubre tenían previsto cerrar la atención al público alrededor de las 13:00. En la calles de esta extensa avenida se escuchaba el murmullo de las personas que comentaban sobre la marcha de las 15:00. Voces a favor y otras en contra. El movimiento de una grúa, poco usual en el centro de la ciudad, despertaba el interés de los transeúntes.
Con el pasar de las horas, los buses iban llegando a las calles aledañas a la concentración y el tránsito fluía con lentitud.
Víctor Vera, habitante del programa municipal Mucho Lote, llegó a la marcha en un bus contratado por dirigentes barriales. Fue en compañía de su esposa y de su pequeño hijo. La familia recibió tres camisetas, botellas con agua y banderas albicelestes.
Así como ellos, alrededor de 150 000 comités familiares llegaron al llamado del Alcalde. Salieron de sus casas a las 13:00, muchos sin almorzar, pero la emoción los embargaba por participar en la concentración.
Las motivaciones de Vera para asistir fueron la “defensa de las rentas justas para Guayaquil” y el rechazo al Presidente.
Un grupo de 200 trabajadores de la exportadora de camarón Expalsa se concentró en el parque de La Merced.
Abordo de un bus urbano, Jenny Martínez decía que quería “defender a Guayaquil” porque está satisfecha con la obra municipal. Es oriunda de Bolívar, pero se siente guayaquileña después de vivir 21 años en la ciudad.
A las 15:00, una multitud esperaba la llegada de Nebot. Las 10 cuadras entre el Malecón y la Plaza del Centenrio, más tres cuadras más adelante, hasta el Consulado de EE.UU., y las calles transversales de la 9 de Octubre estaban copados. Unas 25 cuadras del centro. Según el Municipio más de 300 000 personas estuvieron en la protesta.
Las pantallas proyectaban imágenes de marchas anteriores de Nebot. La voz del Alcalde retumba en los altoparlantes que el Municipio instaló. La expectativa crecía con el retumbar de los tambores al ritmo de la tradicional canción ‘Guayaquileño Madera de Guerrero’. Un bombardeo de mensajes en camisetas y carteles le daban sentido a la marcha.
Cuarenta y cinco minutos más tarde el Alcalde apareció en las calles Santa Elena y 9 de Octubre. Caminó hasta el Malecón rodeado de su familia y simpatizantes.
Tras un recorrido de 20 minutos ,Nebot fue elevado en hombros hasta la tarima. El himno al Nueve de Octubre abrió su discurso ante un escenario lleno de banderas blancas y celestes…