En la consulta popular de mayo del 2011, una alerta de los sectores políticos de oposición despertó inquietud sobre la transparencia de ese proceso. El padrón electoral estaba “inflado”, con más de un millón de votantes.
Esa fue la conclusión a la que llegaron la RED y Sociedad Patriótica luego de cruzar la información de dos fuentes. La primera, el Censo de Población 2010, donde los ciudadanos mayores de 16 años eran 9 663 602. Es decir, los habilitados para votar.
La otra fuente fue el Registro Civil que, bajo la dirección de Paulo Rodríguez, actual presidente de la Judicatura de Transición, determinó que eran 10 952 164 los ciudadanos sufragantes. La diferencia entre las dos bases de datos arroja una población flotante de 1 288 562 votantes.
La oposición dijo hace un año que un padrón electoral con una inconsistencia equivalente al 10% de su universo era peligroso y proclive al fraude electoral.
La ex candidata presidencial Martha Roldós (RED) ha sido insistente en este tema y su reclamo nunca tuvo una “explicación clara” de las autoridades.
La elaboración de ese padrón fue competencia del Consejo Nacional Electoral (CNE), tomando como base la información del Registro Civil. En ese tiempo, Rodríguez reconoció el error, aunque desconoció la magnitud de la cifra. Su primera explicación fue atribuida a los ciudadanos cuyo fallecimiento no fue registrado, a los ecuatorianos que abandonaron el país y no han regresado o a problemas de doble cedulación.
Si bien Rodríguez argumentó que este desfase es un lastre de 111 años, se comprometió a entregar un padrón más limpio para el proceso electoral venidero. El actual Registro Civil dice mantener ese compromiso, pero de acuerdo con la velocidad a la que va el proceso de digitalización de la base de datos de todos los ecuatorianos, en estas elecciones tampoco habrá un padrón totalmente depurado.
Recién, hace 15 días, este organismo firmó convenios con el CNE y Cancillería, enfocados a depurar sus bases de datos y construir el nuevo padrón.
Entre julio del 2011 y junio del 2012, el Registro Civil ha digitalizado 72,2 millones de documentos. Es decir: partidas de nacimiento, defunción y las respectivas actualizaciones que los ciudadanos hacen en esta entidad.
Esta cifra representa, según la institución, un avance del 77%. El 23% restante estará listo en año y medio. También se depuró de la base de datos a todos los ecuatorianos con más de 100 años. Los que estén vivos deberán hacer un registro especial.
“Tenemos un sistema perfecto de emisión de cédulas, pero si no está depurada la base de datos va arrojar inconsistencias en el padrón electoral”, insiste el ex presidente del TSE Carlos Aguinaga.
Omar Simon, ex presidente del CNE, ratifica que la responsabilidad de entregar una lista limpia de ciudadanos es del Registro Civil. Sin embargo, no le preocupan las cifras que denuncia Roldós, pues insiste que la metodología del Censo no es igual a la que usa el Registro Civil. Pero el Centro de Observación Ciudadana advierte que por más diferencias que haya en la forma de armar un padrón, hablar de una población flotante de casi un millón de electores sí es alarmante.
El CNE dará a conocer el nuevo padrón el 13 de septiembre. La vocal Nubia Villacís asegura que las campañas de cambio de domicilio están enfocadas para una depuración de datos.
Roldós mira con distancia la promesa del CNE, pues desconfía de la cercanía de los vocales hacia el Régimen. Lo que ella teme es un “ajuste de puntajes”, pues, con un millón de electores más todo podría suceder.
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