La secretaria de Estado de EE.UU. para Latinoamérica, Roberta Jacobson, rechazó hoy que su país mantenga cualquier influencia política sobre la CIDH, y pidió que las FARC liberen “sin condiciones” al periodista francés Roméo Langlois.
En una entrevista con Efe, Jacobson reaccionó al último anuncio de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), que ayer condicionaron la liberación de Langlois a que se abra un debate sobre la “la libertad de informar” en torno al conflicto.
“No he visto si el presidente (colombiano, Juan Manuel) Santos ha respondido al anuncio de las FARC, pero lo que tiene que hacer la guerrilla es liberar al periodista sin condiciones”, señaló Jacobson, que habló con Efe durante la Conferencia de las Américas que se celebra hoy en Washington.
La alta funcionaria, que evitó profundizar en el tema por considerar que es un “asunto interno” de Colombia, también rechazó los ataques vertidos la semana pasada contra EE.UU. por el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, cuando anunció que su país se retiraría de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
“Estamos tristes porque el presidente Chávez crea que una institución tan fuerte en las Américas, apoyada por todos los gobiernos de la región, es una herramienta de EE.UU., porque no es así”, subrayó la responsable de Washington para Latinoamérica.
Jacobson confió en “que otros países no sigan” el ejemplo de Venezuela y permanezcan en la Comisión, al tiempo que consideró que la petición de Ecuador para que la sede de la CIDH se traslade de Washington a otro país “no da el respeto que merece a la institución” interamericana.
“La CIDH tiene sede en EE.UU. igual que la OEA (Organización de Estados Americanos) tiene aquí sus oficinas, y para mí no hay ninguna razón para moverla. No creo que simplemente porque sus oficinas estén aquí, eso signifique que la Comisión esté influida en exceso por EE.UU.”, afirmó Jacobson.
Ecuador ha argumentado que Estados Unidos no debería acoger el organismo porque no ha ratificado la Convención Interamericana de Derechos Humanos, por la que se rige, a lo que la funcionaria respondió que “eso no debe realmente influir en el lugar de la sede”.
La diplomática dedicó buena parte de su discurso en la Conferencia de las Américas a hacer balance de la pasada Cumbre de las Américas, celebrada en abril en Cartagena de Indias (Colombia) y marcada por la oposición de Estados Unidos y Canadá a que Cuba asistiera por primera vez como invitada.
Preguntada por si EE.UU. estaría dispuesto a dialogar con otros países sobre la posible participación de Cuba en la próxima Cumbre, que se celebrará en Panamá en 2015, Jacobson recordó que “queda mucho tiempo” hasta entonces, aunque no cree que “vaya a cambiar” la oposición “por principios” de Washington a la presencia de Cuba.
“Tenemos un diálogo constante con todos los miembros de la OEA, pero eso no significa que vayamos a discutir cualquier cosa”, añadió.
Jacobson también consideró “imposible” la propuesta del Gobierno cubano para que la madre del contratista estadounidense Alan Gross, encarcelado en la isla desde 2009, viaje a La Habana para visitarlo, una oferta que fue revelada por el propio preso en una entrevista con la CNN el pasado viernes.
“Ella tiene 90 años y tiene cáncer. Es algo imposible para ella viajar para visitar a su hijo. El Gobierno cubano debe permitir a Alan Gross al menos una visita a su madre, pero por encima de todo eso, debe liberarle ahora”, aseveró.
En el terreno económico, la funcionaria destacó la entrada en vigor la próxima semana del Tratado de Libre Comercio (TLC) con Colombia, y restó importancia al retraso de años para su firma, al considerar que “lo importante es que todos los temas sensibles fueron resueltos” y eso ha llevado a “un tratado más fuerte”.
Respecto a la reciente expropiación de la petrolera YPF por parte de Argentina y de Transportadora de Electricidad en Bolivia, Jacobson reiteró que esas acciones “no van a fomentar un clima de inversión que pueda atraer a empresas extranjeras”.
La funcionaria animó a Argentina y Bolivia a tomar como “modelo” el “camino” que han tomado los países de la Alianza del Pacífico -Chile, Colombia, Perú y México- que han decidido “fomentar un ambiente más abierto” para la inversión.
Por último, Jacobson confió en que este mismo año pueda nombrarse un embajador estadounidense en Bolivia, donde no hay jefe de misión desde que en septiembre de 2008 Washington respondió a la decisión del presidente Evo Morales de retirar a su responsable de su embajada del país norteamericano.
“Siempre soy optimista, así que yo creo que sí podemos movernos en el tema de embajadores este año”, concluyó Jacobson.