Ecuador planteará la nulidad de un fallo internacional que le condena a pagar unos 1 770 millones de dólares a la petrolera estadounidense Oxy, que le demandó a raíz de la anulación en 2006 de su contrato en el país, dijo el sábado el presidente ecuatoriano Rafael Correa.
“Ya estamos preparando la apelación, la nulidad del laudo”, manifestó el mandatario durante su informe semanal de labores, y agregó que en el fallo del Centro Internacional de Arreglos de Diferencias Relativas a Inversiones (CIADI) “hubo una opinión disidente” de la jueza francesa Brigitte Stern.
Correa sostuvo que “es importante que haya habido una opinión disidente tan contundente que le da la razón al Ecuador” y afirmó que la millonaria sentencia a favor de la petrolera, divulgada el viernes, “equivale al presupuesto entero del país en materia de educación” para un año.
Quito dispone de 90 días para apelar la sentencia.
El 17 de mayo de 2006, la transnacional planteó una querella por 3.370 millones de dólares ante el CIADI, entidad del Banco Mundial con sede en Washington, alegando que Ecuador violó un tratado bilateral de inversiones, un día después de que el gobierno ecuatoriano declarara la caducidad del contrato que habilitaba a la empresa a extraer unos 100.000 barriles diarios de crudo en la selva de la Amazonia.
Oxy fue acusada de venta ilegal de 40% de sus acciones a la canadiense Encana sin previo aviso a Ecuador, tras lo cual sus activos pasaron a control estatal.
El viernes, el procurador ecuatoriano Diego García señaló que su nación “rechaza categóricamente este fallo” ya que la anulación del contrato “fue dictada en cumplimiento con nuestra legislación interna y el contrato vigente”.