El presidente Rafael Correa señaló, en una entrevista a la revista Folha, de São Paulo, que no descarta otorgar asilo político a los integrantes del gobierno sirio de Bashar al Assad, si es que le fuera solicitado, igual que ocurrió con el fundador de Wikileaks, Julián Assange, entre junio y agosto pasados.
“Cualquier persona que pida asilo en Ecuador, obviamente lo vamos a considerar como un ser humano, al cual debemos respetar sus derechos fundamentales, pero no hemos tenido esas conversaciones”, dijo Correa en la entrevista a Folha. Además confirmó que hace algunos días, el vicecanciller sirio (Faisal Mekdad), visitó el país pero fue para “agradecer la posición objetiva del Gobierno”, frente a la cruenta guerra civil que se vive en ese país de Oriente Medio. Mekdad se reunió con el canciller Ricardo Patiño.
“Ecuador jamás va a estar a favor de la violencia pero miremos la historia. ¿Podemos creer en todas las noticias sobre la masacre del dictador? Recordemos lo que se hablaba de Iraq, sobre las armas de destrucción masiva, debemos ser muy responsables y cuidadosos con eso”.
En la entrevista también se analizaron los casi seis meses que Assange está refugiado en la legación ecuatoriana en Londres. En ese sentido, Folha advierte que hay una crisis sin fin por ese caso.
Pero Correa respondió: “No tenemos todavía una definición, todo depende de Europa y del Reino Unido. Si mañana hubiera el salvoconducto se acaba el problema. Si Suecia decide, como permite su ley, enviar oficiales de la Justicia para entrevistar a Assange en la Embajada de Londres o que lo hagan vía Skype, también. O si el abogado de Assange, Baltasar Garzón, obtiene éxito con los recursos que presentó en la justicia europea se acabó el problema”. “Ecuador hizo lo que debía”.
Ante el ‘impasse’ diplomático ocurrido con Reino Unido, sobre el anuncio de agosto de ingresar por la fuerza a la Embajada, el Presidente dijo que fue un gravísimo error, “un desliz de la Cancillería británica que fue superado totalmente”. “Ellos dijeron que no ofrecerían disculpas, pero en verdad las dieron. Si hubieran impuesto ese precedente, los mayores perjudicados serían ellos mismos, porque tienen muchas más embajadas que Ecuador, y si ellos justificaban la entrada por la fuerza, las embajadas británicas serían las más amenazadas”.
En otra parte de la entrevista, la periodista Flavia Marreiro interrogó sobre sus permanentes quejas por la dolarización.
En respuesta, el Presidente dijo que de seguir en el cargo mantendremos la dolarización. “Los costos de salir (de ella) serían dramáticos. En economía hay cosas muy fáciles de imponer pero muy difíciles de deshacer”.
Finalmente, cuando la periodista le preguntó sobre sus principales errores, Correa dijo: “Errores cometemos muchos, en designación de personas…¿Cuál puede haber sido mi principal error? En este momento no se me ocurre nada: más son los aciertos”.
Más polémica por AMIA
Los dichos del presidente Rafael Correa sobre el atentado contra la sede de la mutualista judía AMIA de Buenos Aires (1994) aún generan revuelo.
El embajador Wellington Sandoval declaró que Correa no era consciente de la repercusión de sus frases “porque no conocía la magnitud y el detalle de todo lo que aconteció” en 1994.
“Tenía 28 años, estaba en una universidad estadounidense y no se daba cuenta de la magnitud de la noticia”, concluyó.