A las 18:00, en Cuenca, ayer se inauguró la V Cumbre de Poderes Judiciales de la Unión Sudamericana de Naciones (Unasur).
El presidente Rafael Correa, al inaugurar el evento, propuso a los países miembros del organismo regional crear el Consejo Suramericano de Justicia.
Los presidentes de la Asamblea Nacional, de la Corte y del Consejo de la Judicatura; los ministros de Justicia y de RR.EE, entre otras autoridades, estuvieron en el acto.
Durante su discurso, el Jefe de Estado, señaló que en América hay hambre de justicia. Por ello, “son los jueces probos, capaces, hambrientos de justicia los imprescindibles”.
También cuestionó la imposición de leyes antidrogas desde Estados Unidos “en su sesgada lucha contra el narcotráfico y aceptadas por los políticos de turno de Ecuador (…) Imponían las máximas penas sin diferenciar consumidor, transportador y narcotraficante (…) Llenaron las cárceles con madres solteras y padres desesperados”. Así, justificó la amnistía concedida a miles de extranjeros, ‘mulas’ del narcotráfico.
En el encuentro, que culminará mañana, participan magistrados de 12 países distribuidos en tres grupos. El primero (Ecuador, Colombia, Argentina y Guyana) discutirá sobre la importancia de la jurisprudencia en América Latina, en el marco de la teoría general…
Perú, Brasil, Venezuela, Chile y Bolivia debatirán sobre la educación y formación de los servidores judiciales; y, Uruguay, Paraguay y Chile en torno a la independencia de la Función Judicial y los mecanismos alternativos de solución de conflictos.