Luego de más de cinco años de análisis y debates en la Asamblea, el Ecuador se sumó a otros 160 países que ya suscribieron su adhesión a la Convención de las Naciones Unidas sobre el derecho del Mar (Convemar).
El 23 de mayo, durante la celebración del Día del Ejército, el presidente Rafael Correa agradeció a la Asamblea por la ratificación del convenio y destacó las ventajas del acuerdo.
Entre ellas figura la definición de una zona territorial marítima y el aumento del mar territorial.
Así lo señala un estudio del Instituto Oceanográfico de la Armada (Inocar), según el cual la Convemar permite incorporar 197 000 km², como parte de la plataforma jurídica. “Con ello, el territorio marítimo es cinco veces más grande que el terrestre”.
La Convención del Mar entró en vigencia en el mundo en noviembre de 1994. El documento internacional reconoce en 12 millas los límites de mar territorial para cada Estado, más 200 millas de plataforma submarina. Esta distancia puede ampliarse a 350 millas si la plataforma nacional se extiende a los archipiélagos.
La Convemar -conocida como la Constitución de los Mares- establece también la existencia de una zona económica exclusiva de 200 millas. Es decir, que su riqueza solo podrá ser aprovechada por el país que soberanamente rige sobre esas aguas.
Sectores diplomáticos coinciden con el Gobierno, en señalar que la adhesión al convenio beneficiará al Estado, al permitir ejercer soberanía sobre la plataforma y los recursos submarinos. Además, resalta que Galápagos tendrá una zona exclusiva, mar territorial y plataforma submarina. El ex canciller Luis Valencia, explica que “la Convemar garantiza la preservación del medio marino y la protección ecológica de toda la plataforma submarina”. Mientras que el ministro de Seguridad, Homero Arellano, sostiene que este acuerdo multilateral respeta todos los acuerdos sobre delimitación marítima.