‘El CNE quiere lavarse la cara ante la opinión pública’

Juan Carlos Solines. Presidente Nacional de la Concertación. Foto: EL COMERCIO

Entrevista. Juan Carlos Solines. Presidente Nacional de la Concertación
¿Confía usted en el proceso de revisión de firmas que impulsa el Consejo Nacional Electoral (CNE)?
Ese organismo ha desarrollado un proceso marcado por la ilegalidad y por el caos. Ilegalidad porque el Consejo Nacional Electoral no tenía una base legal para volver a hacer un trabajo que ya había realizado. Lo que debía hacer es colaborar con la Fiscalía en una investigación para determinar si existió un presunto delito. Pero de ninguna forma para eliminar derechos constituidos.
¿Por qué caótico?
Al tratar de vincular el proceso de revisión ilegal a un calendario electoral y a unas premisas establecidas por el Ejecutivo se establecieron cronogramas irreales para un trabajo tan delicado como la revisión de rúbricas.
¿Le preocupa que la revisión se haya retrasado y cada vez tengan menos tiempo para organizase? La Concertación recién arrancará con la nueva recolección de firmas.
El reglamento electoral estableció un plazo para entregar las firmas. Pero en este escenario estamos recogiendo rúbricas sin conocer cuántas debemos recolectar y con una campaña burda del Presidente de la República y su movimiento Alianza País, que hace un llamando a que la gente no firme, desafiando a la autoridad electoral que debería exhortarles a que dejen de intervenir en asuntos de la función electoral.
¿Cree que este proceso está en contra de las fuerzas políticas opositoras?
Absolutamente, si ya de por sí era difícil que los ciudadanos firmasen, con la campaña publicitaria del Gobierno será mucho más complicado que los ciudadanos atiendan a nuestro llamado. Pero pese a todo, continuaremos.
Concertación se unió a partidos como Sociedad Patriótica y el MPD para cuestionar al CNE, ¿no temen que les vinculen con esos partidos?
Hemos asumido la defensa de la democracia porque consideramos que la existencia de organizaciones políticas es uno de sus pilares, pues genera debate y alternabilidad. Lamentablemente, el Gobierno se ha encargado de que ese debate no exista y que haya un mensaje que pone a todas las organizaciones políticas de oposición en un mismo saco y busca calificarlas a todas como parte del pasado.
El CNE deberá calificar a las nuevas fuerzas, su titular asegura que las recomendaciones realizadas por sus peritos informáticos retrasaron también el inicio de la revisión. ¿Es así?
Esa es otra pieza de la estrategia del Consejo y el Gobierno para confundir a la opinión pública. Ni siquiera hemos podido opinar sobre el sistema, pues no lo conocemos. Solo nos han indicado presentaciones en Power Point.
¿Qué van a exigir para someterse a ese proceso?
Vamos a exigir transparencia, que es lo que menos ha existido por parte del CNE. Se nos convoca a consejos consultivos para dar la sensación de que hay una apertura, pero en realidad se ha ignorado totalmente nuestras críticas y preocupaciones. No tenemos ninguna garantía de que este proceso sirva para determinar si ha existido actos ilegales.
¿Entonces para qué servirá la inversión millonaria que hace el organismo electoral?
Esos millones servirán para que el CNE trate de lavarse la cara institucionalmente frente a la opinión pública, porque es una institución que falló en su responsabilidad histórica de hacer un trabajo minucioso. A la vez que el Gobierno trata de pescar a río revuelto y obtener un beneficio.
¿Cuál sería el beneficio?
Podría descalificar a ciertos movimientos incómodos.
Como resultado de esta revisión el CNE anunció que aquellas fuerzas que no completen el 1,5% de apoyo no tendrán vida jurídica…
En una pretensión ilegal con claros vicios políticos, que ratifica lo que le dije. Eso contribuirá a la manipulación del escenario electoral que configura uno de los elementos para el fraude electoral.
¿Cómo sería este fraude?
Las nuevas formas de fraude electoral se dan cuando se genera, a través de la legislación, condiciones para que las organizaciones políticas no participen y también cuando los ciudadanos tienen dificultades para ejercer sus derechos políticos.
Si luego de este proceso la Concertación no sale bien parada, ¿analizarían unirse a otra fuerza política?
Las barreras que ha puesto este Gobierno para evitar que nuevas fuerzas políticas participen lo que buscan es favorecer los caudillismos. Nosotros buscaremos los mecanismos para participar, una opción es apoyar a otra fuerza. Somos una organización ideológica que busca confrontar ideas y revelar el proyecto caduco del presidente Correa y podremos combatirlo desde otros espacios.
Lucio Gutiérrez hizo un llamado público para que la oposición se uniera…
Insistimos en que seremos reconocidos porque hemos cumplido con los requisitos, pero si las condiciones cambian y se concretan las arbitrariedades electorales, veremos cuál es la mejor opción que encarne nuestras aspiraciones.
HOJA DE VIDA
Su experiencia. Es doctor en Jurisprudencia con maestrías en Derecho comparado, Tecnología y Administración Pública.
Es el Presidente nacional de la Concertación.