Los vocales del Consejo Nacional Electoral (CNE) dijeron ayer que sí tienen la potestad para eliminar de los registros electorales a aquellas organizaciones políticas que no alcancen a completar el 1,5 % de firmas requeridas (157 000). Esto se conocerá luego de la revisión integral de las firmas a las 11 organizaciones políticas que, por el momento, tienen vida jurídica.
No obstante, esta posición es contraria al pedido que 11 fuerzas políticas del país realizaron ayer al organismo electoral. La mañana de ayer, un nutrido grupo de simpatizantes llegó hasta las instalaciones del órgano electoral para exponer sus posturas.
Uno, que el nuevo proceso de revisión de firmas repite los supuestos vicios e ilegalidades ocurridos durante el proceso desarrollado la semana pasada en el coliseo del Colegio Benalcázar, al que lo califican de “ improvisado, inconcluso, fracasado, con una base de datos cuestionada, con un programa informático no confiable y con digitadores no idóneos”.
Dos, que este “vergonzoso escenario” pone en peligro los derechos políticos de los ciudadanos y que las organizaciones políticas emprenderán todas las acciones legales que sean necesarias para evitar que se siga intentando boicotear el proceso electoral.
Por su parte, uno de los pasos que ha dado el CNE para acercarse a los partidos es realizar un consejo consultivo. Este se realizará el martes y se proyecta como un espacio donde primarán posturas irreconciliables.
Desde esa óptica, el organismo electoral envía mensajes contrapuestos. Ayer, su titular, Domingo Paredes dijo que “en Jurisprudencia no hay efectos retroactivos”. Cuando los periodistas le preguntaron si este concepto se tomará en cuenta para que las 11 organizaciones políticas que hoy tienen vida jurídica no sean eliminadas, titubeó…
Entonces, pidió la ayuda del vocal Juan Pablo Pozo quien dijo: “El CNE verificará las inconsistencias”. “Si el Consejo tomó la decisión de reprocesar la información es para hacer una depuración y si en un momento las 11 fuerzas tuvieron la personería jurídica con una información no real el CNE dejaría sin efecto esa resolución”.
Esta explicación es contraria a lo que ha advertido el ex presidente del Tribunal Electoral Medardo Oleas, para quien una decisión tomada en el Pleno no puede ser revertida.
Las declaraciones de Paredes y Pozo dejan en claro que para el organismo el camino está trazado y la postura que tendrán en la reunión con las organizaciones políticas será poco negociable.
Gilmar Gutiérrez (PSP) dijo que irán al consejo consultivo con la predisposición de conversar y buscar una solución. “Ojalá haya apertura por parte del CNE”. Además, el anuncio del CNE, de quitar la personería jurídica a las organizaciones que ya la tienen, le parece ilegal pues esa figura no existe en la Jurisprudencia electoral. “Cuando se revisen las firmas de manera correcta el porcentaje será más bajo”.
Para Juan Carlos Solines (Concertación), la decisión de no reconocer la personería es “una declaración sin sustento legal”, pues los actos administrativos no pueden ser anulados por una voluntad omnímoda. Si el CNE quiere revertir esa decisión debe presentar una acción ante el Tribunal Contencioso Administrativo por lesividad. Solines señala que han decido acudir al consejo consultivo para escuchar y llegar a consensos mas no “para aceptar imposiciones”.
La purga de firmas continúa
El CNE seguirá con el proceso de revisión del 100% de las afiliaciones, que arrancará el 20 de agosto, con la veeduría informática de las fuerzas políticas. Paredes hizo un llamado a las organizaciones políticas para que envíen a sus delegados.
También aclaró las dudas con respecto a los tipos de inconsistencia en las afiliaciones que el CNE ha identificado hasta el momento. Por fuera de las firmas válidas, se hallaron tres tipos de rúbricas irregulares: las no válidas, las que no se pueden comparar porque la imagen de la rúbrica no consta en el padrón y las firmas que quedaron pendientes para ser revisadas por los grafólogos.
La idea, según Paredes, es que en la nueva revisión se aclaren las dudas con respecto a las firmas sin registro de comparación y a las que requieren el examen pericial. De esta manera, las firmas que no sean factibles de una comparación idónea por el padrón, serán consideradas válidas.
Para esta revisión, el nuevo padrón del CNE será alimentado con las bases de datos del Registro Civil y de otras instituciones.
Paredes ha insistido en que no hay ningún objetivo malévolo. “No hay ningún complot. Con la revisión del 100% de las firmas se dará tranquilidad al país”.
Las organizaciones políticas tendrán hasta el 24 de septiembre para recoger las rúbricas que les hagan falta. Según el CNE, “el proceso de reconteo será dinámico y las organizaciones, a medida que se les vaya revisando las rúbricas, conocerán el porcentaje que les haga falta recolectar.
El PSP asegura que tiene una reserva de 50 000 afiliaciones. Otros grupos como el PSC están organizando a su gente para una recolección masiva de firmas, a contrarreloj, con una ciudadanía enfadada por este proceso…