La convocatoria de los ‘indignados’ cuyo punto de encuentro fue la Plaza de Francisco, en el centro de Quito, tuvo poca acogida.
Desde las 10:00 un grupo de personas empezó a llegar al sitio para expresar su rechazo al manejo económico y a la política mundial. En Asamblea, el movimiento acordó reunirse nuevamente el 12 de noviembre.
En el centro de la plaza se colocó una tela blanca de 3 metros por 15 en donde los niños y los asistentes tuvieron la oportunidad de dibujar con pintura y expresarse.
En horas de la tarde a la concentración de los ‘indignados’ llegaron los autodenominados ‘kbreados’. Estos últimos fueron abucheados por discurso partidista en contra del Gobierno. “El 15O es un movimiento universal”, dijeron.
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Dentro de la jornada se registraron otros incidente. El opositor del régimen, Jorge Álvarez acusó a un reportero de la presidencia de ser ‘lamemedias’ del Gobierno.
Posteriormente a la llegada de Alberto Acosta este mismo ciudadano lo recriminó por haber sido parte de la Asamblea Constituyente y haber abandonado el barco cuando todo estaba perdido. ‘Por eso ya no creemos en él’.
La española Haisea de Miguel, vocera de los ‘indignados’, dijo que la idea de la convocatoria era que los ciudadanos tengan un espacio de libre expresión. Pero aseguró que Álvarez no forma parte del colectivo.