¿Festejo, celebración u homenaje? A tres días de que se cumpla el primer aniversario de los hechos del 30-S, el oficialismo, en su conjunto, ha librado un verdadero debate semántico. Su objetivo: utilizar las palabras más adecuadas para describir la serie de actos conmemorativos de la revuelta policial que, para el Gobierno, fue un intento de golpe de Estado que se frustró. Y como tal, el 30-S fue “el día en que triunfó la democracia”.
Pero los familiares de las víctimas cuestionan esos eventos oficiales, al punto de que Sandra Jiménez, hermana del policía Froilán, reprochara que se quiera “bailar sobre la tumba de mi hermano”.
En las últimas horas, funcionarios del Gobierno han tratado de aplacar la polémica. La ministra de la Política, Doris Soliz, dijo que no se trata de hacer ningún festejo sino un acto de conmemoración y de reconocimiento a las víctimas de esta crisis.
El secretario de Alianza País, Galo Mora, también se pronunció en ese sentido. Además, este Diario conoció que la Secretaría del movimiento envió un correo electrónico a funcionarios, dirigentes y militantes de la agrupación, el jueves, solicitando que se mantenga el discurso en el marco de “un homenaje” y no de una fiesta. La idea es neutralizar las críticas de la oposición.
Todo esto sucede mientras en la Asamblea el oficialismo insiste en buscar una resolución que condene los hechos del 30-S, pero que aún no tiene los votos.
Dalo Bucaram (PRE), aliado del oficialismo en la conformación de las comisiones parlamentarias, no votará a favor de la resolución que condena el 30-S. “Ahora celebran triunfos pírricos de la democracia”, dijo.
Y señaló estar de acuerdo con el pedido de las víctimas de que ese día sea de luto nacional y no de festejos. “Rafael Correa quiere convencernos de que hubo un intento de golpe de Estado y gasta millones en eso. Es mentira que hubo un plan orquestado para tumbarlo”.
Carlos Velasco, asambleísta del oficialismo, apuntó que no “bailarán sobre la tumba de Froilán”, como dijo su hermana. Comentó que ellos respetan el proceso de duelo. Dijo que solo buscan generar reflexiones.
Su compañera, Irina Cabezas, apuntó que será una fecha para rendir homenaje a los fallecidos. Y para que los grupos, que estuvieron detrás del intento de golpe de Estado sepan que existe una ciudadanía movilizada para defender la democracia.
El legislador de Madera de Guerrero, Andrés Roche, cree que el Presidente pudo haber organizado una misa. “Pero tienen la desfachatez de festejar, habrá hasta un concierto de rock, en la Tribuna del Sur (en Quito) y concursos de grafiti”.