Un plan de seguridad se ejecuta en Tulcán
Redacción Tulcán
Cuatro presuntos delincuentes pretendieron secuestrar a un cambista y fueron detenidos, el jueves pasado. Por este hecho, la Policía Judicial reforzó los operativos de seguridad en la zona céntrica de Tulcán.
3 delitos frecuentes
Unos 400 cambistas laboran en Tulcán en tres organizaciones. El año pasado se inició una investigación interna por los robos que se suscitaron en diferentes meses, principalmente en Navidad y en los feriados.
Los asaltos, robos a domicilios y atraco a personas son los de mayor incidencia en Carchi, según datos de la Policía. En 2009 se receptaron 450 denuncias.
En la actualidad, los patrullajes se hacen en la unidad móvil de atención ciudadana. Esta recorre aleatoriamente, por los alrededores del parque Isidro Ayora. Se estaciona a un costado y con una cámara oculta monitorea a los transeúntes y a quienes se acercan hasta los cambistas.
Como parte del operativo también existe personal uniformado que dirige el tránsito y efectivos del Grupo de Operaciones Especiales (GOE), quienes hacen patrullajes durante el día y recorren las calles Sucre y Bolívar.
En la esquina del parque Isidro Ayora los cambistas muestran los fajos de billetes para el canje en pesos y en dólares. Pequeños bolsos y los bolsillos de sus prendas les sirven para guardar el dinero.
No obstante, la inseguridad ha hecho que quienes se dedican a esta actividad cambien su forma de trabajar. Ellos antes incluso iban a domicilios u oficinas para realizar las transacciones. En la actualidad no, los cambistas no se mueven de este lugar.
Temen ser secuestrados, robados y además, en esta área existe reguardo policial. El cambista Damián Romo cuenta que ya no trabaja con tranquilidad.
A inicios de enero uno de sus compañeros fue asaltado. “Un grupo de jóvenes que llegaron de Colombia, pintados la cara de blanco y negro, se acercó a su vehículo. Le apuntaron con un revólver en la cabeza y le quitaron unos USD 7 000”.
A los pocos días se enteraron de la persecución de la Policía a los supuestos plagiadores. El jefe de la Policía Judicial, Pablo Salazar, indicó que los presuntos delincuentes querían secuestrar a un cambista y pasarlo a Colombia.
En el auto, en el que se movilizaban, se encontraron pasamontañas, cinta de embalaje y armas. Los jóvenes fueron detenidos.
Este hecho aumentó la preocupación entre los peseros (cambistas) de los parques Ayora e Independencia, además, de quienes se ubican en el Mercado Central.
El año anterior también se registraron víctimas de atraco. Por eso, solicitaron a la Policía que se les permitiera portar armas para su protección. El pedido fue negado, pero los uniformados se comprometieron a dar mayor seguridad en las áreas donde se ubican, durante el día.
El viernes pasado, en una reunión con los cambistas, Salazar les sugirió que instalen una oficina y que a través de ventanillas ellos realicen su trabajo. De esa manera estarían más seguros.
Para un grupo de transaccionistas, esa propuesta no es válida. “Si los delincuentes saben que en un solo lugar hay dinero, van a asaltar el local”, dice Pablo Mafla.
Romo, presidente de los cambistas del parque Isidro Ayora, expresa que se debería pensar en la propuesta. “Nos movilizaríamos sin sobresaltos en nuestros vehículos, sin el temor de ser asaltados”. Solo en esta organización laboran 120 personas.
Salazar dijo que en la zona céntrica los operativos se incrementaron y que tanto en esta área como en otros sectores de la ciudad se labora durante todo el día.