Redacción Quito
El Municipio anunció ayer un plan sobre el transporte público para llegar hacia las nuevas terminales de buses de Quitumbe, en el sur, y Carcelén, en el norte. Esto pese a que aún no hay una fecha definida para el traslado de los operadores de buses y comerciantes.
En la propuesta se detallan las rutas que deberán tomar los usuarios para acceder a las estaciones de buses. Los usuarios que se dirijan hacia las provincias del sur del país como Azuay, Bolívar, Cañar, Chimborazo, Cotopaxi, El Oro, etc, deberán ir hacia la terminal de Quitumbe.
Los sistemas de transporte que llegarán hasta allí serán Trolebús y Corredor Sur Oriental (que aún no está en funcionamiento).
También llegará el servicio intercantonal desde Machachi con las operadoras Carlos Brito, Mejía, Lupocoli, Joysur. Además, a las cooperativas Juan Pablo y Disutrans, que llegan hasta las instalaciones de la terminal se les modificará su ruta. Esto, para que solo los articulados del Corredor Sur Oriental y del Trolebús accedan hacia Quitumbe.
Quienes se dirijan a las provincias del norte del Ecuador, como Imbabura y Carchi, así como localidades del norte de Pichincha, deben ir hasta la terminal de Carcelén. Hasta allí llegarán alimentadores del Corredor Central Norte, de la Ecovía y del Trolebús. Cada sistema de buses tendrá entre tres y cuatro unidades que saldrán con intervalos de 10 minutos cada una (ver infografía).
Estela Cárdenas vive en el sector Las Casas, en el noroccidente, y no está de acuerdo con el nuevo plan de transporte. Ella viaja todos los fines de semana hacia Tulcán y toma los buses en la av. Occidental. “Ahora tendré que ir hasta Carcelén. Eso significa pagar un pasaje adicional”.
Según el plan municipal, ahora Cárdenas deberá tomar los articulados del Trolebús o del Corredor Central Norte, para luego acceder a un alimentador que la traslade hacia la terminal de buses de Carcelén o ir en taxi.
Esteban Ruales vive en Cumbayá y también tendrá que hacer varios transbordos para llegar a Quitumbe, en el sur. Primero tendrá que tomar un bus interparroquial que lo lleve hacia la terminal Río Coca, luego subir a un articulado de la Ecovía que lo traslade hacia La Marín. Desde allí tendrá que realizar otro transbordo para tomar el Corredor Sur Oriental que lo conduzca hasta Quitumbe.
Según el Municipio, para la movilización de los usuarios en Quitumbe también habrá cerca de 1 100 vehículos, entre taxis y camionetas de carga liviana.
A Carcelén también llegarán los buses interparroquiales desde El Quinche y Guayllabamba, a cargo de la Flota Pichincha. Además, contará con tres operadoras de taxis: Hernando Parra, Quito Moderno y Cumandá.
En relación con la carga liviana, la terminal del norte tendrá dos operadoras: Pichincha Norte y La Pulida.
El traslado aún no se concreta
Los transportistas y comerciantes de la terminal de buses de Cumandá, en el Centro, señalan que aún no se define la fecha de traslado hacia las nuevas estaciones de Quitumbe y Carcelén.
Teresa Vicuña, comerciante de Cumandá desde hace 16 años, desconoce cuándo comenzará a trabajar en Quitumbe. “No tenemos idea de la fecha. Aún queda mucho por hacer en los locales de la nueva estación. Faltan luz, agua y líneas de teléfono”, se queja.
Silvia Soria, otra comerciante, coincide con Vicuña. Señala que no conoce cuándo se trasladará con su negocio de caramelos hacia Quitumbe. “Hay muchas reuniones pero no se define nada”.
Por su parte, Marco Barreno, gerente de la operadora Aerotaxi, señala que están dispuestos al traslado siempre y cuando exista la seguridad necesaria en las nuevas terminales. “Nosotros nos trasladaremos en la fecha que se nos diga, pero también necesitamos que haya garantías para nuestros equipos”.
Según Barreno, una fecha tentativa para la apertura de Quitumbe es a finales de este mes. Sin embargo, hasta el cierre de esta edición, los transportistas y el Municipio continuaban reunidos para definir una fecha para el traslado hacia la nueva terminal.