Petroecuador asumió la función de buscar financiamiento externo tras un convenio con el Ministerio de Finanzas. Foto: Archivo/ EL COMERCIO
Petroecuador asumió la función de buscar financiamiento externo para cubrir las necesidades fiscales a través de un convenio interinstitucional, firmado con el Ministerio de Finanzas en el 2014 y al que tuvo acceso este Diario.
La estatal, que tiene como fin comercializar, transportar y refinar el petróleo, ya venía actuando como parte de la búsqueda de recursos a través de las llamadas preventas petroleras. La entidad entrega el dinero al Fisco, el cual devuelve a plazos esos recursos. Pero con este convenio asumió directamente esas funciones.
El documento, que no ha sido de acceso público, fue firmado por Fausto Herrera, entonces ministro de Finanzas, y Marco Calvopiña, quien estaba al frente de Petroecuador y en la actualidad está preso.
La cláusula cuatro del acuerdo, de cinco páginas y fechado 3 de diciembre del 2014, señala: “Petroecuador podrá gestionar la obtención de líneas de crédito que requiera el Ministerio de Finanzas para el financiamiento de programas y/o proyectos estratégicos y/o prioritarios”.
Aunque es la petrolera ecuatoriana la que consigue los recursos, el convenio fija que los proyectos por ejecutarse serán coordinados por Finanzas.
Desde el año en que se firmó este convenio interinstitucional, Petroecuador ha celebrado cuatro contratos de ventas anticipadas petroleras.
La empresa comprometió 497 millones de barriles de petróleo con esos contratos, a cambio de USD 2 970 millones en créditos y USD 3 100 millones en anticipos. Estos montos han ido al Fisco.
Hasta septiembre, según datos de Petroecuador, el saldo por pagar del capital de esas operaciones alcanzaba los USD 2 884,3 millones.
Uno de ellos es el crédito que el país recibió en enero del 2016 por un monto de USD 970 millones, del Industrial and Comercial Bank of China (ICBC), a cinco años plazo.
El préstamo aparece registrado como deuda de Petroecuador, en el boletín de deuda externa del Ministerio de Finanzas. En ese boletín se detalla que será destinado a proyectos y programas prioritarios del Estado. El desembolso estuvo atado a un contrato de compraventa de crudo, a cinco años, con Petrochina.
La estatal Petroecuador se comprometió a la provisión de
76 320 000 barriles, con una estructura comercial en la que se entrega el petróleo crudo a precio de mercado conforme el día de carga.
Petroecuador confirmó ese año que los valores de facturación de la compraventa de crudo ingresan a la petrolera, pero luego pasan inmediatamente a la Cuenta Única del Tesoro que maneja el Estado.
En abril del 2016, Rafael Poveda, exministro de Sectores Estratégicos, confirmó que los recursos conseguidos a través del convenio entran al Presupuesto del Estado.
Carlos de la Torre, ministro de Finanzas, explicó que las deudas adquiridas por la petrolera en el marco del convenio no se registran como deuda pública del Gobierno Central. “Entran en el conjunto amplio de los pasivos del sector público no financiero, no como deuda consolidada ni agregada”, expresó.
De la Torre no precisó cuánto ha recibido Finanzas de Petroecuador desde que se firmó el convenio, ni en qué se han usado los recursos.
Además, este Diario envió un cuestionario sobre el tema al Ministerio, pero el área de Comunicación dijo que no lo respondería. Lo mismo ocurrió con un pedido hecho a Petroecuador.
Para Luis Calero, experto en legislación petrolera, este mecanismo contraviene el artículo 315 de la Constitución. Esa norma señala: “Los excedentes de las empresas públicas podrán destinarse a la inversión y reinversión en las mismas empresas. Los excedentes que no fueran invertidos o reinvertidos se transferirán al Presupuesto General del Estado”.
El experto explica que ese mismo artículo detalla que las funciones de la petrolera son gestionar los recursos estratégicos del Estado, no buscar recursos para el Fisco.
Mauricio Pozo, exministro de Finanzas, señaló que “la petrolera se convierte en un baipás para que el Gobierno aumente sus niveles de deuda en niveles desproporcionados”.
El convenio está vigente hasta diciembre del 2020. El principal problema, explicó Pozo, es que este instrumento le permite a Petroecuador adquirir deuda que no se registra como tal, y esto deviene en una falta de transparencia en las cuentas públicas.
Este Diario intentó entrevistar a Fausto Herrera, pero el exministro dijo que no se pronunciará debido a que se están realizando informes de Contraloría al respecto.
La Contraloría, en su último examen, cuestionó que no se pudiera determinar con exactitud el destino de créditos externos, entre los cuales están aquellos que se garantizan con petróleo. Esto significó glosas para el exministro de Finanzas Herrera y otros funcionarios.
En contexto
Este convenio, que no es de acceso público, fue firmado en el 2014, cuando Fausto Herrera era ministro de Finanzas. En Petroecuador, Marco Calvopiña fungía como gerente. Calvopiña fue sentenciado por el delito de asociación ilícita el año pasado.