Periodistas de EE.UU. y Canadá preparan reportajes sobre Quito

Un grupo de periodistas canadienses y estadounidenses llegaron a Quito para realizar reportajes sobre los atractivos turísticos de la ciudad. Foto: Eduardo Terán/ EL COMERCIO

Un grupo de periodistas canadienses y estadounidenses llegaron a Quito para realizar reportajes sobre los atractivos turísticos de la ciudad. Foto: Eduardo Terán/ EL COMERCIO

Un grupo de periodistas canadienses y estadounidenses llegaron a Quito para realizar reportajes sobre los atractivos turísticos de la ciudad. Foto: Eduardo Terán/ EL COMERCIO

La ciudad antigua y nueva. El ir y venir de la gente, el murmullo constante y las voces de los vendedores son parte del panorama que seis periodistas canadienses y estadounidenses recopilan en su visita a Quito. Los profesionales trabajan para revistas y guías de viaje internacionales y llegaron la noche de ayer martes 14 de abril, para recorrer la ciudad y difundir sus atractivos a través de reportajes.

El itinerario para los viajeros, hospedados en el Centro Histórico, empezó en la calle Morales (La Ronda). Desde allí, al pie de El Panecillo y a unos metros del puente de ‘Los Gallinazos’, compartieron con artesanos y, más adelante, en la calle Bolívar, degustaron las colaciones de la Cruz Verde.

En el grupo de cinco mujeres y un hombre, hubo una opinión común: “la arquitectura de Quito es estupenda”. Pero, aunque al ingresar a la iglesia de La Compañía, el asombro fue unánime, ellos también llegaron interesados en las historias de la ciudad.

Una de las visitantes se separó del grupo, para conocer a las vendedoras de plantas medicinales. Personal de Quito Turismo, acompañó a la profesional. La mujer se quedó en la Plaza de Santa Clara, en la calle Rocafuerte y Cuenca, pues le atrajo conocer sobre la tradición quiteña y la espiritualidad que esta ciudad preserva.

Para Tracey Drake, editora en jefe de la revista Niche, el aeropuerto de Tababela fue su primera impresión positiva. “Es un lugar moderno”, comentó. A diferencia de lo que muchos capitalinos creen, para la canadiense, “Quito es una ciudad limpia y ordenada”.

Otra de las periodistas coincidió en la percepción de limpieza. A Ana Parent, para quien es la segunda visita a Quito, una imagen se le grabó: “las mujeres recogiendo la basura, con una pala en una mano y una escoba en la otra”. Con un movimiento de sus manos recreó la escena que vio en varios puntos del Centro Histórico. Parent es periodista en la revista Tourisme Plus y está por definir el eje de su artículo, pues apenas “es el primer día” de esta visita.

Otra de las paradas fue el Hotel Plaza Grande, al costado norte de la Plaza de la Independencia, en cuyo escenario sobresalen las cúpulas redondeadas de la Catedral Metropolitana, el Palacio de Carondelet, el Palacio Arzobispal, el monumento en honor a los patriotas. Allí los periodistas aprovecharon para tomarse fotos y seguir con el itinerario: una demostración de la preparación de un cebiche ecuatoriano.

Aunque a Quito llegan unos 680 000 turistas extranjeros al año, la visita de estos seis es particular, pues se enmarca en las estrategias de difusión de los atractivos del Distrito Metropolitano en el mundo.

Los periodistas permanecerán en la ciudad hasta este domingo 19 de abril. La próxima parada será la Mitad del Mundo, este jueves. Antes de llegar al monumento, donde también conocerán el edificio de la Unasur, harán una escala en el Mercado de Iñaquito. Uno de los propósitos de esta etapa de difusión es que los profesionales conozcan los espacios tradicionales de la ciudad y a su gente, para que puedan mostrar estas opciones en el exterior.

En el itinerario también está la visita a una hacienda florícola y, posiblemente, un recorrido por el noroccidente del Distrito Metropolitano.

Luego del recorrido, en el que hay convenios con la empresa privada, la empresa municipal hará un seguimiento de las publicaciones hechas por los invitados, para difundirlas.

Hasta tanto, la tarde de este miércoles, los invitados subieron a El Panecillo, para admirar, al pie de la réplica de la Virgen de Legarda, el contraste entre la ciudad patrimonial y el Quito moderno.

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