Periodismo riesgoso

Enfoque internacional La Nación, Argentina, GDA

La seguridad de los periodistas en el mundo se ve cada vez más amenazada por quienes desean callar la verdad con balas, como si fuera posible matar lo evidente en el cuerpo de quienes se atreven a denunciar corrupción, narcotráfico o abusos de poder.

El ejercicio de la tarea de informar se vuelve una actividad muy peligrosa y no solo para la libertad de expresión, sino  para quienes ponen en riesgo su propia vida mientras intentan contar lo que ven en sus países.

En efecto, 2009 se recordará como el peor año para la práctica del periodismo en el planeta, según el informe presentado por el Comité para la Protección de Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés), que señaló que, con una cifra récord, 71 periodistas fueron asesinados, 136 se encuentran privados de libertad, encarcelados, y una periodista se encuentra desaparecida.

Los países más arriesgados para el ejercicio del periodismo fueron Filipinas, donde 33 periodistas murieron, 31 de ellos durante un enfrentamiento entre clanes rivales en el sur del archipiélago; Somalia, donde perecieron nueve periodistas; Iraq y Paquistán, con cuatro muertos en cada territorio; Rusia, con tres; México, con dos muertos y una desaparecida, y Afganistán y Sri Lanka, con dos en cada uno.

Además de estos 71 casos confirmados de periodistas muertos en cumplimiento de su trabajo, hubo otros 25 que fueron asesinados por motivos no aclarados, si bien todo hace presumir que su suerte estuvo signada por su profesión. La dificultad para confirmar esa presunción es que en la mayoría de los países en los que ocurrieron las muertes de los reporteros este tipo de crímenes goza de impunidad y los casos no son resueltos.

En la Argentina, donde el cruel asesinato del fotógrafo José Luis Cabezas sigue siendo una advertencia sobre los extremos a los que pueden llegar aquellos que quieren silenciar a los periodistas, 15 diputados opositores denunciaron amenazas del Gobierno y se comprometieron a defender la libertad de prensa.

En la presentación del informe Libertad de Expresión en la Argentina, Año 2009, la diputada radical Silvana Giúdice denunció “un plan para restringir la libertad de expresión, neutralizar el disenso y cambiar la matriz de los medios”.

Por cierto, cada discurso presidencial entraña desde hace unos años exageradas amonestaciones a los periodistas y los medios de comunicación, como si inventaran la realidad que, según Cristina Kirchner, no pertenece al “país real”, compartido con su círculo íntimo, sino al “país virtual”, curiosamente habitado por la mayoría de los argentinos.

En el mundo, actualmente 136 periodistas se encuentran  tras las rejas por diversos motivos. La mayoría de esos casos está concentrada en cinco países: China, con 24 periodistas presos; Irán, con 23; Cuba, 22; Eritrea, 19; y Myanmar (ex Birmania), nueve.