El gobierno del presidente Rafael Correa enfrenta a partir de hoy la peor ola de descontento social desde que empezó su segundo mandato, el pasado 10 de agosto, a raíz de las protestas de profesores públicos y el comienzo de un levantamiento indígena.
La movilización convocada por la Conaie comenzó la medianoche de ayer, con manifestaciones y bloqueos de vías en al menos siete provincias del país, según adelantó Humberto Cholango, dirigente de la organización.
“El levantamiento incluye marchas, movilizaciones en ciudades, cierre de carreteras a escala nacional, pero se concentrarán en áreas indígenas”, agregó.
La Conaie argumenta que la ley de Agua, en trámite en la Asamblea Legislativa, permitirá que empresas transnacionales mineras se apropien de ese recurso.
El sábado, Correa acusó a los indígenas de querer desestabilizar su gobierno con “mentiras”, puesto que la propuesta no pretende privatizar el agua.
A la protesta de los nativos y movimientos sociales y campesinos, se suma el gremio de los maestros, que desde hace dos semanas desarrolla manifestaciones, con el apoyo de estudiantes de universidades y colegios, contra una reforma a la Ley de Educación.
Ante la movilización, el Gobierno repite cadenas de radio para explicar que la Ley de Aguas no privatiza ese recurso. Ayer al mediodía, cuando comenzó a jugarse la penúltima fecha del Campeonato de Fútbol, se emitió una cadena que interrumpió por cinco minutos las transmisiones de los partidos.