El presidente del Legislativo, Julio Borges, adelantó que los parlamentarios saldrían a sesionar en las calles. Foto: AFP.
El Parlamento venezolano, de mayoría opositora, anunció que celebrará una sesión el martes (10 de enero de 2017) en el Hospital Vargas, uno de los 320 centros de salud públicos severamente afectados por la crisis económica.
La Asamblea Nacional se reunirá a las 14:30 (hora de Venezuela) en los espacios abiertos del recinto hospitalario, ubicado en el sector de Cotiza, en el oeste de Caracas, tras declarar este lunes 9 de enero el “abandono del cargo” del presidente Nicolás Maduro.
La oposición parlamentaria acusa al mandatario de incumplir deberes y hundir al país en una “crisis humanitaria” , por sufrir una severa escasez de alimentos y medicinas, una inflación que es la más alta del mundo y una criminalidad desbordada.
El presidente del Legislativo, Julio Borges, había adelantado en su discurso de juramentación de la nueva directiva -el pasado jueves- que los diputados saldrían “a las calles” para plantear a los venezolanos las “distintas alternativas que tiene el país” para salir de la crisis.
“Vamos a sesionar en los hospitales, en las fábricas expropiadas, en las regiones, donde está el pueblo sufriendo (…) Y que el pueblo sepa que nuestra presencia y fuerza estará allí”, manifestó.
Los hospitales venezolanos se han visto afectados por la crisis económica, agravada por la caída del petróleo, prácticamente la única fuente de ingreso del país caribeño.
Según el Observatorio Venezolano de la Salud, la escasez de material quirúrgico afecta a 81% de los servicios hospitalarios, y la de medicinas para los pacientes, a 76%. Solo 15 230 camas están operativas (34,8% del total), cuando se requerirían 100 000.
El gobierno venezolano, en cambio, defiende que la “revolución socialista” invirtió USD 250 000 millones en salud en los últimos 13 años, especialmente en un programa de atención primaria que envía médicos -muchos cubanos- a zonas populares.