El Gobierno de Paraguay solicitó hoy a Argentina, Brasil y Uruguay la revisión jurídica del Protocolo de Adhesión de Venezuela al Mercosur, por considerar que no se han cumplido algunas oligaciones institucionales.
Paraguay argumenta que su posición está amparada por el derecho internacional y recuerda que su país fue sometido “injusta e ilegalmente”, en el año 2012, por ejercer disposiciones constitucionales, como fue la destitución del presidente, Fernando Lugo.
Aunque la carta paraguaya no menciona directamente el hecho, hace referencia a la suspensión que sufrió en aquel momento, porque los otros países miembros del bloque consideraron que hubo una ruptura institucional.
En medio de aquella crisis Venezuela ingresó al bloque de integración subregional, en una medida también resistida y criticada por Paraguay, cuyo congreso demoró en aprobar la decisión de los demás socios del bloque. En la nota oficial divulgada hoy, el Gobierno de Paraguay reitera que “ha conservado siempre su vocación integracionista” y reafirma “su solidaridad con el pueblo venezolano”.
La administración del presidente, Horacio Cartes, asegura que continuará apoyando el diálogo entre todos los actores, para resolver las actuales dificultades que enfrenta ese país caribeño. La nota de Paraguay se suma al anuncio de Brasil que estudia aplicar medidas jurídicas contra Venezuela en el ámbito del Mercosur, también porque considera que ese país no cumple con algunos compromisos asumidos cuando se incorporó al bloque regional.
El bloque sudamericano atraviesa una de sus crisis más agudas desde que Uruguay decidió, el 29 de julio, abandonar la presidencia pro témpore que le correspondería a Venezuela, por la rotación alfabética semestral. Argentina, Brasil y Paraguay consideraron que la presidencia quedó acéfala, mientras que Uruguay no ve razones jurídicas para negar el traspaso y Venezuela denuncia una supuesta conspiración para desplazarla del bloque, por razones políticas.