La Diócesis de Riobamba informó que Julio Parrilla presentó su renuncia debido a que alcanzó el límite de edad estipulado por el Código de Derecho Canónico para ejercer el obispado. Foto: archivo / EL COMERCIO
La mañana de este miércoles 28 de abril del 2021, el Vaticano informó que el papa Francisco aceptó la renuncia de Julio Parrilla, obispo de Riobamba y la de su heredero designado, Gerardo Nieves, quien fungía como Vicario General de la Diócesis de esa urbe, capital de Chimborazo.
En un comunicado oficial de la Diócesis de Riobamba se informa que Julio Parrilla presentó su renuncia debido a que alcanzó el límite de edad estipulado por el Código de Derecho Canónico para ejercer el obispado, así como también por problemas de salud. “Todos los obispos están obligados a presentar su renuncia una vez cumplidos los 75 años”, detalla el comunicado.
En el exhorto también se informa que los motivos que orillaron a Gerardo Nieves, quien fue llamado a suceder a Parrilla como obispo, son personales y “nadie tiene derecho a poner en tela de juicio ya que toca lo más sagrado de cada persona, como es su libertad y su responsabilidad”, se informa.
Él presentó su renuncia en febrero del 2021, una semana antes de la ceremonia en la que sería consagrado obispo de la Diócesis de Riobamba.
En esa ciudad hay polémica por la renuncia de los dos sacerdotes. La dimisión se dio tras la publicación de varias denuncias hechas por Julia Serrano, una religiosa española que trabajó junto a monseñor Leonidas Proaño, quien se radicó en Riobamba hace 40 años.
Serrano ha hablado de malgastos e intentos de borrar la memoria de Proaño. Así como también de continuar realizando cobros por matrimonios, bautizos, misas y otros sacramentos, pese a la disposición del papa Francisco, quien dijo que esos servicios religiosos serían gratuitos.
En su blog, denominado Redes Cristianas, Serrano dice que las denuncias fueron enviadas al Vaticano, pero que desconoce si llegaron a su destino. “De todos los escritos enviados a la Santa Sede, no sabemos si alguno de ellos ha llegado a su destino dado que los intermediarios el Vaticano son hábiles para archivar papeles que no les convienen. Tal vez, sería mejor, sacar a la luz toda la documentación que hemos enviado al Vaticano para que este sufrido pueblo de Dios sepa quiénes son los supuestos representantes oficiales de Dios en la diócesis de Riobamba”, dice su escrito.