Imagen de locales comerciales vacíos en Londres. Las restricciones más severas y la nueva cepa del coronavirus en Reino Unido ha generado incertidumbre en los mercados de valores de Europa. Foto: EFE
La nueva cepa del coronavirus aparecida en el Reino Unido ha originado una oleada de pánico vendedor en los mercados europeos y en Estados Unidos que han encajado fuertes descensos este lunes 21 de diciembre del 2020 ante el temor de las consecuencias en la economía de esta oleada.
Las bolsas europeas han sufrido fuertes caídas al aparecer una nueva cepa del coronavirus en el Reino Unido que se transmite al parecer con mayor facilidad y así el parqué de Madrid ha bajado un 3,08%, Fráncfort un 2,82%, Milán un 2,57%, París un 2,43%, Londres un 1,73% y el índice Eurostoxx50 de las 50 empresas de mayor capitalización un 2,74%.
El Gobierno británico comunicó que ha comenzado a propagarse una variante del virus que se transmite supuestamente con mayor facilidad, por lo que el número de pacientes hospitalizados ha aumentado y se acerca a los peores momentos de la primera ola a principios de año.
Mientras tanto, el retraso en la negociación entre la Unión Europea (UE) y el Reino Unido sobre el Brexit añadió más preocupación a los inversores después de que en la medianoche del domingo 20 de diciembre venciera la fecha límite para tener un acuerdo.
A esto se ha sumado el cierre de fronteras por parte de varios países a vuelos o transbordadores procedentes del Reino Unido a raíz de la aparición de una nueva variante del coronavirus en Londres y el sureste de Inglaterra.
Wall Street abrió este lunes en rojo, aunque el Dow Jones de Industriales, su principal indicador, abandonaba los descensos y subía ligeramente un 0,04%.
Pese al acuerdo para un segundo plan de estímulo por la pandemia en EE.UU., el selectivo S&P 500 perdía un 0,71% y el índice compuesto del mercado Nasdaq, en el que cotizan las principales compañías tecnológicas, bajaba un 0,56% a las 19:00 horas (17:00 GMT) tras el cierre de los mercados europeos.
Esty Dwek, directora de mercados de Natixis Investment Managers, ha destacado que los mercados ya habían anticipado un invierno difícil para Europa, pero ha advertido de que será necesario tener en cuenta medidas más estrictas para los próximos meses, ya que es poco probable que esta cepa permanezca solo en el Reino Unido.
No obstante, añade Dwek, la visión a largo plazo sigue siendo constructiva y también resulta alentador que los responsables políticos de Estados Unidos se hayan puesto de acuerdo sobre un nuevo plan de ayudas.
En cuanto al precio del petróleo, el crudo intermedio de Texas caía el 3,70% hasta USD 47,44 por barril y el crudo Brent bajaba un 3,67% hasta USD 50,34.
Para Diego Morín, del intermediario financiero IG, uno de los sectores más perjudicados es precisamente el petrolero, cuyos descensos responden al miedo a nuevas restricciones de movilidad, lo que generaría un estancamiento de la demanda de los productores, tal y cómo se ha visto en meses anteriores.
El euro abrió a la baja, pero más tarde moderaba los descensos a solo un 0,11% hasta USD 1,2236, mientras que la onza de oro bajaba el 0,17% y se situaba en USD 1 887.
Para Javier Molina, del intermediario financiero eToro, las noticias de nuevos confinamientos no deben ocultar que, a pesar del impacto de la pandemia, las rentabilidades generadas por los diferentes tipos de activos muestran un tono alcista, ya que en Estados Unidos el Nasdaq100 acumula alzas superiores al 45% y el S&P500 está en zona de máximos históricos.
En cuanto a las bolsas europeas, las noticias sobre la crisis sanitaria seguirán impactando de forma brusca, generando volatilidad y dando, posiblemente, por aniquilado el efecto de subida asociado a la Navidad, comenta Molina.