Ana Delgado buscó juguetes que despierten la creatividad de su hija, Doménica. Foto: EL COMERCIO
En medio de esta pandemia la bicicleta se volvió un artículo necesario y popular, comenta Karen Ayala. En esta Navidad se las regalará a sus sobrinos, de 4 y 10 años, quienes ansían acompañar a su abuelo, de 58, a sus rutas diarias.
Desde la semana pasada, la joven de 29 años busca opciones y cuenta con un presupuesto de USD 400 para esos regalos. Samuel, su sobrino más pequeño, es bastante activo, por lo que considera que podrá desfogar toda su energía a través del ciclismo.
Lo vivido en este año, por la pandemia, ha provocado que los niños permanezcan sin suficiente movimiento, “primordial para su desarrollo”, explica la neuropsicóloga y psicopedagoga Mercy Vaca. Eso ha hecho que manifiesten emociones negativas como irritabilidad, impaciencia o intolerancia.
Para trabajar estas situaciones, causadas por el encierro, la especialista señala que es importante que en esta Navidad se regalen cosas que permitan a los niños moverse. Eso, insiste, necesitan hacer durante al menos 45 minutos diarios, aunque sea en un espacio pequeño dentro de casa.
No hay que olvidar que los chicos permanecen frente a pantallas todo el tiempo, dice el deportólogo Carlos Salazar, por lo que en esta Navidad se debe pensar en juegos que ayuden a generar movilidad de todo el sistema óseo y muscular.
Algunos juguetes que estaban destinados a espacios abiertos se adaptaron, para ser aprovechados en sitios interiores, más pequeños. El deportólogo pone como ejemplos aros para básquet, cuerdas para saltos o rayuelas en plástico o lona.
Si la familia cuenta con patio, Salazar también recomienda que los chicos reciban como regalos patines, patinetas, bicicletas o pelotas. Las clases de educación física se han reducido, recuerda. “Necesitan desarrollar habilidades básicas de velocidad, resistencia y fuerza, siempre adaptándose a la capacidad de cada niño”.
Incluso sacos de arena y guantes de box se ofrecen en las jugueterías, dice, y son un buen regalo que permitiría a los niños liberar energía retenida desde que no asisten a sus escuelas. Además, “el sistema inmunológico se beneficia con la actividad física, por eso es importante que los chicos estén activos”.
A madres como Ana Delgado les preocupa que muchos juguetes para niños no permitan que desarrollen ninguna habilidad. Eso la motivó a crear Kidácticos, un emprendimiento de juguetes para aprender, ser creativos, solucionar problemas, pensar lógicamente y ser críticos.
Tienen, por ejemplo, rompecabezas en 3D, con varias funciones, entre ellas el fomento de las habilidades motoras finas. También ofrecen los llamados juguetes Stem, que enseñan sobre ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas, a través, por ejemplo, de la construcción de una casa o de un parque de diversiones.
Para elegir el regalo este año, la especialista Vaca pide a los padres pensar en la importancia de que los dos hemisferios del cerebro de los chicos se conecten. Para lograrlo, una opción es darles un instrumento musical para que aprendan a tocar o algo que les permita relacionarse con la música.
Cuando los niños lo piden hay que potenciar su interés por los instrumentos, sostiene la psicopedagoga y directora del Centro Crecemos, Cristina Tapia, quien recomienda regalarles una opción básica (no sofisticada) para empezar y analizar si el gusto se mantiene. El juguete debe tener el objetivo de desarrollar una destreza, además de la diversión.
Los rompecabezas, juegos de mesa y de manualidades se han convertido en una opción en los últimos meses, refirieron dos tiendas consultadas.
Los padres han adquirido estos productos para que sus hijos, que ahora pasan más tiempo en casa, se recreen y compartan tiempo con la familia.
Marcela Rodríguez es madre de dos niñas, de 10 y 11 años. Por Navidad les compró un ajedrez y un juego que ayuda a mejorar la agudeza visual. Este último consiste en buscar una imagen dentro de un tablero que contiene 400 figuras, de tamaños y colores similares.
Aparte de estos juguetes, a propósito de la temporada navideña en las jugueterías, desde el mes pasado se ha registrado mayor demanda de los muñecos Ksimeritos, las muñecas Lol Surprise, los Cry Babies, juegos de cocina, figuras de acción, pistas de autos, drones y robots. Esto lo confirmaron los representantes de la Corporación La Favorita y de Almacenes Estuardo Sánchez.
Para la venta de estos productos, las tiendas brindan facilidades de pago, aplican descuentos para mercadería seleccionada. Con estas acciones se busca reactivar este sector. Entre enero y septiembre de este año la importación de juguetes se redujo en un 52% en relación con el mismo periodo del 2019, indicó la Cámara de Comercio de Quito, con cifras del Banco Central del Ecuador.
Las recomendaciones por edad
De 0 a 2 años se recomiendan juegos que permitan la estimulación de los sentidos; con música o los correcaminos, que ayudan a aprender a caminar.
A los de 2 a 3 años les sirven juguetes grandes. Pueden ser de plástico, goma o caucho. Frutas, herramientas de construcción, animales, etc.
De 3 a 4 años aportan los juegos de roles como los disfraces de médicos, bomberos, chef. Eso incentiva el aprendizaje de vocabulario y de profesiones.
Para preescolares de 4 y 5: rompecabezas, juegos de mesa o triciclo para el desarrollo de equilibrio y motricidad. También son divertidas las pelotas y plastilina.
De 5 y 6, juguetes que desarrollen la motricidad, para formar figuras con fichas pequeñas, legos, que desarrollan la atención; juegos de mesa, para la memoria.
Hasta los 12 años se deberían elegir los juegos con temática cognitiva y para fortalecer la parte física, objetos para jugar fútbol, básquet, hacer ciclismo, entre otros.