Al Hospital Carlos Andrade Marín ingresan diariamente 15 000 personas. Foto: archivo / EL COMERCIO
Desde este lunes, 16 de julio del 2018, en el Hospital Carlos Andrade Marín, del IESS, se controlará que cada paciente ingrese solo. En el caso de niños, adolescentes, adultos mayores o personas con discapacidad se permitirá el acceso con un acompañante.
Diariamente, 15 000 personas circulan por la casa de salud, cantidad que coparía el Coliseo General Rumiñahui. Pero solo el 50% requiere un servicio médico o realiza un trámite administrativo. La entidad indicó que eso ocasiona demoras en la atención y genera congestionamiento en los principales pasillos.
El plan contempla un primer control. En la puerta de ingreso a consulta externa, en la calle Ayacucho, y en la sala de emergencias, en la avenida 18 de Septiembre, se verificará el tipo de atención que busca el paciente: médica o administrativa.
Luego se conducirá a las personas a los diferentes módulos de atención al cliente, donde se verificará la hora, especialidad y el médico que los atenderá.
El objetivo, indicaron, es descongestionar los pasillos y mantener las medidas de bioseguridad, que requiere un hospital de tercer nivel.
Para acceder al Andrade Marín se debe contar con un turno de cita médica, examen o procedimiento. También acercarse a las ventanillas de información, de la planta baja, para registrar el turno. Incluso los trabajadores del hospital deberán portar siempre su credencial.
En este hospital del IESS de la capital, de 60 000 m2, hay 4 365 trabajadores.