Si se buscara la época para viajar o hacer turismo fuera de Ecuador, la respuesta es que este es el momento preciso para hacerlo.
Los ecuatorianos tenemos una gran ventaja: nuestra moneda. El dólar está superapreciado frente a la devaluación de las monedas de los países vecinos; es decir, nosotros podemos comprar o gastar más con pocos dólares. El poco valor de las monedas vecinas, como el peso, el sol, el real -para mencionar algunas- o el euro en la Comunidad Europea hace que los servicios y productos en esos países sean mucho más baratos para nosotros en estos momentos.
Entonces, tenemos muchas ventajas, tanto en los servicios -sea de alimentación, transporte, turismo, hotelería, productos y bienes, que se ofrecen a menor precio.
Por ejemplo, ahora es mucho más barato ir a Colombia o Perú -los destinos más cercanos- a pasar unos cuantos días con poco dinero. También están Chile o Argentina. Las promociones de vuelos a menor precio que el año pasado o paquetes convenientes se venden desde principios de año. Si queremos ir más lejos está Europa, cuya moneda se ha devaluado desde septiembre pasado. Cada euro cuesta USD 1,04 cuando hace cinco meses estaba en USD 1,36.
El turismo hacia fuera también pudiera estar alentado por la imposición de las recientes salvaguardias o aranceles a 2 800 productos, que empujarán a los ecuatorianos a viajar para hacer compras más económicas.
Aún es pronto para decirlo, pero posiblemente el turismo interno se encarecería, pues productos como las frutas, carnes o mariscos están gravados con los impuestos. De todas maneras, en enero de este año crecimos a 169 378 visitantes extranjeros frente a ese mismo mes del 2013 cuando se recibieron 152 576 viajeros, según la estadística del Ministerio de Turismo.
En todo caso, el dólar estará fuerte uno o dos años más, según las proyecciones de organismos económicos mundiales, por lo que hay oportunidad para viajar.