Amberes/Rüsselsheim, DPA
La planta de Opel en la ciudad belga de Amberes será cerrada y sus 2 500 trabajadores perderán su empleo, según confirmó hoy la empresa automotriz alemana.
“Somos conscientes de lo que esta decisión supone para los empleados en Amberes y para sus familias, y junto con ellos lo lamentamos”, aseguró el presidente de Opel, Nick Reilly.
Previamente, fuentes sindicales de Opel en Amberes habían informado a la agencia de prensa Belga sobre la decisión de cierre. En la planta de Opel en Amberes, que da empleo a unas 2 500 personas, se fabrica el popular modelo Astra.
Según informó la televisión flamenca VRT, la fábrica de Opel en Amberes cerrará sus puertas a finales de junio próximo.
Se trata del primer cierre de una fábrica de la marca Opel, duramente castigada por la crisis de su casa matriz General Motors (GM).
La GM tenía previsto, en principio, desprenderse de su filial Opel y venderla al grupo austro-canadiense Magna, aunque en noviembre pasado renunció de manera inesperada a la venta. La decisión de GM se basó en que -en su opinión- el mercado automotor en Europa se ha recuperado notablemente de la crisis.