Las calles de Muisne, en Esmeraldas, se inundaron tras la subida del mar. Foto: Marcel Bonilla / EL COMERCIO
Los habitantes de la población de Estero de Plátano de la parroquia Galera, cantón Muisne, sur de la provincia de Esmeraldas, observaban cómo el fuerte oleaje y aguajes destruían el muro de escolleras del malecón del balneario.
Las fuertes olas, de la tarde de este martes 27 de octubre del 2015, que golpeaban contra el muro, lo destruyeron en un 45%, de acuerdo con un informe levantando ese mismo día por los representantes de la Unidad de Gestión de Riesgos de Municipio de Muisne.
A decir de la evaluación realizada, el oleaje socavó tres metros del malecón en siete lugares diferentes. “Con este fuerte oleaje y aguaje es probable que se vaya todo el malecón”, dijo Elí Torres, de la Unidad de Gestión de Riesgo de ese Muisne.
“Los oleajes de la madrugada de este miércoles fueron muy fuertes y pone en peligro lo que queda del malecón”, dijo Leonardo Álava, habitante del sector.
Según el Instituto Oceanográfico de la Armada (INOCAR) los oleajes y aguajes irán hasta este jueves 29 de octubre de 2015. En el caso de Esmeraldas se registrarán olas de altura media de 0,8 metros y hasta dos metros de altura.
El malecón de la población Estero de Plátano fue afectado por los oleajes. Foto: Marcel Bonilla / EL COMERCIO
Estero de Plátano es una población que está dentro de la reserva Marina de Galera-San Francisco. Este es uno de los balnearios apetecidas por los turistas internacional dedicados al surf, por sus grandes olas y los arrecifes.
La población que vive del turismo con la venta de cebiches y el alquiler de pequeñas cabañas se muestra preocupada porque el malecón de la playa da vida a este paradisíaco lugar.
Mientras eso ocurre en Estero de Plátano, la isla de Muisne volvió a inundarse las tarde de este martes y la madrugada de este miércoles 28 de octubre.
El agua anegó las calles de los barrios como Santa Rosa, San Pedro, Bellavista y llegó hasta el centro de la ciudad. Los bomberos, marinos y las brigadas barriales integradas por moradores de estos sectores estuvieron en vigilia desde a las 02:00 de este miércoles, cuando se registró la subida del mar.
No se han registrado mayores afectaciones en las casas de la isla de Muisne de 9 800 habitantes, pero la población se puso alerta con tiempo, subiendo sus enseres a sitios seguros para evitar que sean destruidos por el agua.
El representante de la Secretaría de Gestión de Riesgos en Esmeraldas, Betto Estupiñán, dijo que se espera realizar una evaluación a estas zonas, a las que han impartido recomendaciones sobre qué hacer en caso de una inundación mayor.
No obstante, el alcalde del cantón Muisne, Eduardo Proaño, aseguró que lo que procede es una inmediata intervención con las obras de mitigación, pero el Municipio no cuenta con los recursos económicos y las deudas que se mantienen limitan la acción municipal.